Agencias | LA PRENSA DE LARA.- «Cruzar la selva del Darién es como atravesar por el mismo infierno». Así lo describen muchos migrantes que logran, con suerte, atravesar con vida 5.000 kilómetros cuadrados de junglas, ríos y empinadas montañ;as.
Los riesgos son muchos. Quienes toman este largo e inseguro periplo con el propósito de alcanzar una vida más digna están expuestos a robos y abusos -incluyendo violaciones sexuales- y hasta deben pagar a grupos irregulares que controlan la zona.
También se enfrentan a los peligros ocasionados por condiciones naturales, como los ríos caudalosos y animales salvajes. Sin embargo, estos riesgos parecen ser minúsculos ante la necesidad de huir de la crisis económica que atraviesa Venezuela.
Testimonios
Las últimas semanas se han viralizado cientos de imágenes y videos que describen la triste y cruel realidad de aquellos que se aventuran a pasar por la selva. Tal es el caso de Edwel Chirinos, quien perdió a su esposa e hija mientras ellas intentaban cruzar esa selva para reencontrarse con él en Estados Unidos.
«Me enviaron (un) video con mi hija en una moto. Ya de ahí no sé más nada de ella. Les escribí el lunes en la mañ;ana y yo empiezo a sospechar. El lunes en la noche me escriben de un número, porque mi esposa está muy delicada de salud y me dicen que tengo que pagar $1,000 para mostrármela. Yo (pregunté) si está secuestrada, si está con vida, y pedí una foto y me dijeron: ‘Aquí las reglas no las pones tú, las pongo yo'», cuenta Chirinos.
El hombre dijo que solo ha podido ver los cuerpos de su esposa e hija mediante una foto.
«Lo único que sabemos es que están todavía en el río donde se ahogaron, porque el chico que pasó la información me dijo que echó a la bebé y a la mamá al río para que un ente gubernamental las recogiera donde desemboca. Es una locura, una tortura no poder enterrar a tu hija» Continuó diciendo.
El periodista Alex Macías hizo un recuento del caso del expolicía Freddy Lira, quien aparece en un video tan enfermo que hasta el «coyote» pone en duda que resistiría el recorrido.
Lira inició su recorrido en Cúcuta, viajó a Medellín y de allí a Necoclí, donde esperaría su turno para inte
Pero la angustia se apoderó de ellos cuando visualizaron un video donde se le ve muy enfermo y uno de los llamados coyotes dice que se lo encontró gritando desesperadamente en medio de su travesía.
Hasta ahora no se tiene más información del caso, algunos guías dicen que lo enterraron en la selva y otros dicen que no saben nada de él.
Otro caso relevante del que se tiene conocimiento fue el de Marine Carolina Castellano Suárez, de 26 añ;os, quien murió en el mes de febrero mientras viajaba con su esposo e hijo al ser arrastrada por la corriente de un río y se golpeó con una piedra en la cabeza.
Wilmer Monterola, de Nueva Esparta, falleció tras haber permanecido en la zona La Llorona durante 15 días con una fractura en su pierna que le impedía trasladarse.
Se pronuncian
David Smolansky, comisionado para la crisis de refugiados y migrantes venezolanos de la OEA, aseguró que cuatro migrantes venezolanos murieron en la última semana intentando cruzar la selva del Darién, información que conmocionó a la colectividad en medio de una oleada de información sobre las condiciones tan demandantes del viaje.
La mayoría de estos migrantes había sido reportado como extraviado días anteriores de conocer su certeza de muerte. Este mismo mes, también reportaron como desaparecidas a integrantes de una familia: Alberto Fernández, Mary de Fernández y su pequeñ;o hijo Alberto Enrique, de 2 añ;os. Y otros dos jóvenes de 19: Vicky Jiuliana Contreras Luengo y Brayan Melendrez.
Durante una entrevista para VPI, Luis Eguiluz, dijo que la clínica San Vicente en Panamá de Médicos Sin Fronteras atienden unas 200 personas a diario por diferentes afectaciones en su paso para llegar a Estados Unidos.
El jefe de la misión, informó que han documentado en lo que va de añ;o 120 casos de violencia sexual y más de 400 desde que empezaron el programa en abril de 2021.
En este sentido, indicó que los migrantes continúan cruzando pese haber mucha información en los medios y aun cuando «muchas organizaciones presentes en el lado colombiano les explican los riesgos y aun así los asumen (…;), pero lo que hemos visto en el otro lado cuando llegan es que no se imaginaban las dificultades de esa ruta.»
«Muchos de ellos están expuestos a robos,