EFE | LA PRENSA DE LARA.- Un Santa Claus y varios voluntarios -la mayoría periodistas- entregaron este sábado regalos a 350 niñ;os de una comunidad de Caracas, gracias a donativos del gremio y de particulares, una iniciativa, llamada «Un juguete, una buena noticia», que un grupo de trabajadores de la prensa desarrolla desde 2017 con el objetivo de arrancar sonrisas a los pequeñ;os.En la entrada de la comunidad, a la que se accede a través del Cementerio General del Sur, varios niñ;os esperaban, emocionados, a Santa Claus y a sus duendes, quienes recorrieron un camino repleto de lápidas con grandes sacos llenos de juguetes a cuestas.
La periodista Wanda López relató a EFE que esta iniciativa nació en 2017, cuando la «situación del país estaba bastante compleja en términos políticos y sociales», por lo que cinco periodistas, en ese momento compañ;eros en un medio digital independiente, decidieron unirse para crear este proyecto, con el que entregaron 100 juguetes en varias comunidades de Caracas en su primer añ;o.
«Ya hoy estamos cumpliendo cinco añ;os. Es nuestra séptima jornada porque en el 2018, cuando comenzó la deserción escolar, decidimos cambiarlo un poco, diversificarlo un poco, y transformarlo en ‘Un cuaderno, una buena noticia’. En ese momento, ayudamos a tres comedores populares de Petare, y seguimos haciendo estas jornadas igualmente cada diciembre», dijo.
En esta ocasión, llevaron una buena noticia a 350 niñ;os y niñ;as, que forman parte de un total de 250 familias de esta comunidad.
Señ;aló que, si bien la meta era llegar a los 350 juguetes, lograron recolectar, gracias a donativos de periodistas y particulares dentro y fuera del país, un total de 451, que repartirán también a familias de otras zonas.
Por su parte, Ángelo Rangel, líder comunitario de 30 añ;os, dijo a EFE que esta comunidad, construida «a lo largo de estos últimos añ;os», está «olvidada», debido a las dificultades para su acceso.
«Cuando vemos el paso al llegar y cómo poder llegar a la comunidad, vemos lo complicado que es y, por eso, ellos se sienten olvidados, porque nadie llega», agregó.
Fuente: EFE