John Magdaleno es politólogo y profesor de la UCAB y la UCV, además de director de la Consultora POLITY
Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- «Una victoria holgada de la oposición es lo que puede iniciar una negociación que dé pie a una transición hacia la democracia en Venezuela», así lo explicó el politólogo John Magdaleno, el 27 de junio, durante una visita a la ciudad de Barquisimeto. Considera que Edmundo González Urrutia, candidato de la Mesa de la Unidad Democrática, tendría que sacar como mínimo 720 mil votos por encima de la candidatura de Nicolás Maduro, presidente de la República, aunque un escenario ideal sería una brecha de ventaja de 10 puntos para plantear una situación límite que obligue a un «gobierno hegemónico y autoritario», como lo califica al chavismo, a una salida estratégica del poder.
Magdaleno, quien ha investigado en la última década los 680 episodios de cambios de régimen político que se han dado en el mundo entre 1900 a 2019, señala que hay pruebas fehacientes que en 427 de esos casos, se ha iniciado un proceso de restitución de garantías democráticas, «383 son episodios en lo que se inicia una transición política, 145 son casos exitosos, 226 son fallidos», detalló. Esto quiere decir que cada cuatro de 10 casos en los que se ha iniciado un proceso de transición en el mundo, se ha logrado el restablecimiento de la democracia y el estado de derecho.
La teoría ha comprobado que en aquellos países que atraviesan una dictadura, pero que previamente han tenido largos periodos de democracia, esa transición suele ser mucho más corta. Explica que una transición no es sólo el cambio de las figuras del Poder Ejecutivo, es el cambio de todas las reglas del juego.
Se da cuando la coalición de poder comienza a perder respaldo popular y los factores que sostienen al régimen le retiran apoyo. Eso hace que violar garantías o reprimir tenga unos costos políticos muy elevados, que los obligue a plantearse dilemas, aceptar una negociación con la oposición y llegar a acuerdos para cambiar el sistema político.
Afirma que la elección del 28 de julio, puede llevar a Nicolás Maduro a un punto límite, que lo obligue a negociar. No por casualidad el oficialismo estableció la fecha de las elecciones cinco meses antes de la toma de posesión presidencial. Estratégicamente podría servir ese tiempo para negociar si el PSUV llega a perder el poder.
John Magdaleno se basa en encuestas como Delphos, que señalan que Edmundo González, tendría 27 puntos porcentuales por encima del oficialismo, y la ventaja que da Consultores 21 es de 21 puntos. Aunque admite, que la realidad es que acudan a votar un promedio de 11 millones de electores, porque existen 4.5 millones de electores en el exterior que no tendrán derecho a votar en las presidenciales, y hay una abstención histórica que se presenta en estos procesos electorales que puede rondar el 27%. Por lo que los resultados que reflejan las encuestas, al final podrían ser más reñidos o con menos brechas de ventaja.
Pasos para el cambio
El experto indicó que una transición arranca cuando se da una «liberalización política». Es decir, se liberan presos políticos, se permite el retorno de los exiliados, hay mayor tolerancia del Gobierno a los medios de comunicación social, y mayor participación de los sectores sociales.
«El inicio de una transición es una distensión política. Un periodo en el que se restituye el estado de derecho… Eso no siempre es de forma automática. Primero se restituye el imperio de la ley y luego se revierten las represiones severas», resaltó.
Si las cosas van marchando bien, el país puede caminar hacia la democratización. Es decir, la instalación de garantías institucionales que permita que las autoridades sean seleccionadas en una elección libre y competitiva. «Llegar aquí supone restituir una series de medidas. La elección libre y competitiva es el final de la etapa democratizadora, primero se tiene que restituir el estado de derecho», insiste.
Señala que en Venezuela se dieron dos transiciones en el siglo XX, la primera fue en el periodo 1936 a 1948. Inicia con la muerte del dictador Juan Vicente Gómez. Los grandes hombres la liberalización en ese momento fueron los presidentes Eleazar López Contreras e Isaías Medina Angarita, este último legalizó a los partidos políticos de oposición de la época, como Acción Democrática y el Partido Comunista de Venezuela.
La segunda transición ocurrió con la salida del poder del general Marco Pérez Jiménez, tras el golpe de Estado en 1958. Y eso en la historia fue una gran excepción, porque señala que la mayoría de los golpes de Estado que se han dado en el mundo, no conducen a transiciones democráticas exitosas como ocurrió en esa ocasión en Venezuela.