Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA – Venezuela se ha convertido en el único país del mundo donde sus ciudadanos compran el efectivo por la severa escasez que existe. Comerciantes informales y pasajeros aseguran que prefieren perder hasta el 25% del valor de un dólar en físico, para conseguir billetes de 10 mil, 20 mil y 50 mil bolívares y poder pagar el transporte público fundamentalmente. Economistas aseguran que por cada 100 bolívares que existen en el sistema financiero venezolano, solo dos bolívares están disponibles en efectivo en los bancos. Esta realidad provoca que la economía avance hacia una digitalización desordenada, donde hasta ahora ni la banca ni el Estado han hecho las ingentes inversiones que se requieren para expandir la banda ancha de internet del país que aguante todas las transacciones financieras.
Carolina Alvarado tiene un kiosco en la plaza San Juan, ubicada en la calle 25 con carrera 21 de Barquisimeto, vende cada plato de hervido en un dólar, es decir un millón 677 mil 658 bolívares, según el tipo de cambio @EnparaleloVzla de ayer. Pero si un cliente le paga en bolívares en efectivo afirma que es capaz de dejarles la sopa más económica. «Es que le arrebato los billetes de las manos, vivo en el norte de Barquisimeto y requiero un millón de bolívares en efectivo diario para poder trasladarme a trabajar», comentó la mujer. Desde hace un mes afirma que no recibe un pago en billetes y le ha tocado pagar el pasaje con transferencia pagando el doble de su valor.
«Antes del proceso de dolarización desordenada que vivimos en Venezuela, el 12% de la cantidad de liquidez monetaria que había en el país era en efectivo, es decir de cada 100 bolívares 12 bolívares era en efectivo, quizás en la actualidad el porcentaje que se requiera no sea el mismo, porque por la hiperinflación la escasez de bolívares ha sido reemplazada por la preferencia de los ciudadanos de tener dólares que no pierdan valor en el tiempo», comentó Alejandro Castro, gerente de Operaciones de Econométrica.
Según el último reporte público del BCV de fecha 5 de febrero, la liquidez monetaria se ubica en 673 billones de bolívares, o el equivalente a 364 millones de dólares. «Eso es producto de que la economía venezolana se ha contraído en siete años (81,2%). En la medida en que la economía venezolana se vaya contrayendo, la liquidez monetaria en términos de divisas va a ser cada vez menor», soltó Castro.
Para Jesús Casique, economista, no es que el efectivo en Venezuela sea inexistente, es que ahora es casi en su totalidad electrónico. «En el país se está dando una economía digitalizada en sentido contrario al resto del mundo, porque en las naciones donde se han podido establecer economías digitales no hay hiperinflación. Acá en Venezuela atravesamos 38 meses de hiperinflación«, informó.
Afirma que Nicolás Maduro se empeña en impulsar una economía «100% digital», con un único propósito: disminuir los costos de producción de billetes en efectivo y de transporte, pero se olvida de un aspecto imprescindible para que este proceso no sea tormentoso para el país. Se requiere que la banca realice inversiones en tecnología que involucren elevados costos fijos que luego se van a disminuir conforme aumente el número de transacciones digitales. «Suecia es en un país pionero en la digitalización económica pero todavía conserva efectivo. En Venezuela además de un proceso de hiperinflación, tenemos problemas de transporte, de gasolina, no todos los venezolanos están bancarizados, lo que hace que la propuesta del gobierno sea demasiado agresiva», opinó.
Avizoran nueva reconversión
El economista Jesús Casique sostiene que por los niveles de hiperinflación del país, el gobierno podría aplicar en el primer trimestre o semestre del año una tercera reconversión monetaria. Argumenta que es recomendable que se le quiten cuatro o seis ceros a la moneda. «Vamos rumbo a una reconversión monetaria porque los billetes de dos hasta los billetes de 500 bolívares ya no se ven en el mercado, son el 93% del total del efectivo, y los billetes de 10 mil, 20 mil 50 mil bolívares representan el 7% del efectivo, obviamente ese es otro problema, la distribución desigual de las denominaciones monetarias en el país», refirió.
Afirma que de aplicar una reconversión el Estado tiene que producir o importar cuatro mil millones de monedas o billetes de alta denominación para regularizar el problema del efectivo. Hacer cada billete vale alrededor de 15 centavos de dólar. «Aplicar una reconversión monetaria será un fracaso si no se atiende el problema hiperinflacionario de Venezuela, tal como ocurrió en 2018 cuando se creó un cono monetario que en unos meses ya estaba completamente pulverizado», comentó.