Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Una vez más, la oposición exhortó al chavismo a volver a la mesa de diálogo en México. La solicitud se hizo esta vez a través de la Comisión Delegada presidida por Juan Guaidó, este martes 22 de marzo, reseña Efecto Cocuyo.
Esta instancia legislativa representa a la Asamblea Nacional electa en 2015, cuyo periodo ha sido extendido dos veces de forma inédita, a pesar de que la Constitución Nacional establece que el mandato es de cinco años.
En un acuerdo aprobado en conmemoración del Día del Médico se exige, en el séptimo y último punto, «la reapertura inmediata de los procesos de diálogo de México» para llegar a un acuerdo que ponga fin a la crisis política que genera la crisis económica y humanitaria.
«Reformateo del diálogo»
El llamado cobra importancia, luego de que el máximo representante de la delegación oficialista, Jorge Rodríguez, afirmara que el mecanismo de México «cumplió su misión» y advirtiera que no se reunirán más con el dirigente Juan Guaidó, a quien señaló de tener vínculos con un narcotraficante.
El Gobierno de Nicolás Maduro ha dejado entrever que su aspiración es sustituir a la representación de Guaidó por voceros de la oposición «moderada», que son cuestionados por su estrecha colaboración con el oficialismo, entre ellos los diputados José Brito y Luis Parra; algo que forma parte de lo que el oficialismo denomina el «reformateo» del diálogo.
Así mismo, deja abierta la posibilidad de que las conversaciones no se hagan en México sino en Venezuela, en una mesa de diálogo paralela.
México, único mecanismo válido
Guaidó defendió México como lugar y método de las negociaciones, en la última rueda de prensa que ofreció el 17 de marzo.
«La alternativa democrática está representada por Gerardo Blyde, que firmó un memorando de entendimiento. El jefe de la delegación es Gerardo Blyde, que representa a la Plataforma Unitaria a través del mecanismo de México. El mecanismo es ese», declaró.
El gobierno de Estados Unidos también aboga por el regreso a la mesa de México, este fue uno de los puntos que tocó la delegación de Joe Biden que hizo una polémica visita a Miraflores.