Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- La empatía y respeto que permita una sana convivencia con la población neurodiversa es la sensibilidad social que puede hacer más ruido y despertar el interés del Estado para asegurar condiciones de vida, así lo considera el doctor, Fernando Bellera, presidente de la Sociedad Venezolana de Neurocirugía, quien asegura que unidos se puede lograr más presión hacia la verdadera inclusión, en un mundo donde no exista la desigualdad. Bellera es el primer médico en alzarse con el Récord Guinness en posición de plancha, bajo la inspiración de la condición espectro autista que necesita contribuyentes, ese galardón lo entregó como ofrenda a la Fundación «Sólo Faltas Tú».
Hacer que la brecha sea más corta es la recomendación de este especialista, de 54 años de edad, y que se inspiró en sumar más voluntades por el diagnóstico de su hijo. Vivir desde el desconocimiento y todo un proceso de adaptación que exige de un equipo multidisciplinario junto al acompañamiento familiar lo movió a ser parte de esa familia azul. La intención es que la sociedad entienda que todos aportan con «un granito de arena», entendiendo situaciones al ganar la comprensión de ponerse en los zapatos del otro y reconocer esa lucha que llevan los padres que confían en el desarrollo de capacidades y talentos de estos niños que pueden ser adultos con la madurez y seguridad en la vida. Ese es el resultado del empuje de especialistas, terapeutas, docentes y todo el equipo que tiene sus esperanzas en personas con oportunidades de crecimiento.
Con esa personalidad tan agradable de Bellera, confiesa que la inspiración para prepararse a romper ese récord de 5:05 segundos nació por la admiración al trabajo realizado desde la Fundación «Sólo Faltas Tú» y que se transformó en un objetivo para poder soportar esas planchas de 200 libras sobre su espalda, manteniendo la posición durante 6 minutos 15 segundos en septiembre de 2023.
Sonríe al recalcar que se decide por este reto, al considerar a la posición de plancha como un proceso de dosificación de la dificultad, tal como esas trabas que se presentan en la cotidianidad y que exigen esos ejercicios de resistencia. Un panorama parecido al que deben afrontar la mayoría de las personas en la neurodiversidad, ante lo erróneo de considerarlos de un mundo diferente. De allí, que la concentración extrema y fortaleza en esa posición de plancha expresa ese sufrimiento al que se puede estar expuesto, donde se mide la capacidad de caer de rodillas al suelo o seguir avanzando al mantenerse firme.
Puede ampliar esta información en nuestra edición impresa de este viernes 24 de noviembre.