Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Al menos 2.000 pacientes trasplantados en Venezuela enfrentan desde septiembre de 2022 escasez de inmunosupresores. Reymer Villamizar, director de la organización Amigos Trasplantados de Venezuela (ATV), denunció que la situación es similar a la escasez de medicamentos de 2017 y 2018.
«Muchas personas, gracias a la falta de estos medicamentos inmunosupresores, presentaron episodios de rechazo y complicaciones, en varios casos, muchos perdieron el trasplante y otros perdieron la vida«, recuerda Reymer Villamizar sobre las consecuencias de no contar con los medicamentos.
Algunas de las entidades más afectadas son Zulia, con hasta cuatro meses sin recibir los medicamentos, Mérida y Bolívar con 3 meses, y Caracas con un mes. La ONG indica que los inmunosupresores permiten que el sistema inmunológico del paciente se inhiba, que sea posible el trasplante y posterior recuperación.
«No es un solo medicamento, es el coctel de varios medicamentos que hacen que se inhiba el sistema inmunológico y hacen que sea posible el trasplante y la persona pueda recuperar su calidad de vida«, señaló Villamizar al Circuito Éxitos.
Una persona trasplantada necesita los inmunosupresores de por vida
Compuestos como el micofenolato mofetil y micofenolato sódico, que son entregados por las farmacias de alto costo en el país, son los utilizados en pacientes trasplantados. La ATV ha recibido llamadas de personas que requieren los medicamentos, por lo que denuncian la escasez.
Villamizar indicó que el Estado no puede discutir la reactivación de trasplantes sin tener los medicamentos que concreten la recuperación. Una de las poblaciones más afectadas son las personas diagnosticadas con lupus, ya que también requieren medicamentos que son de alto costo en el país.
La ONG también denunció que la escasez también ocasiona la disminución de las dosis estipuladas y eleva los costos. Las personas que compran sus medicamentos deben gastar entre 500 y 700 dólares mensuales para poder recuperarse adecuadamente.
«Una persona que está trasplantada debe continuar con el medicamento prácticamente de por vida porque eso es lo que hace que el órgano se mantenga allí. En Venezuela hay personas con hasta más de 40 años de trasplante«, expresó Villamizar.
Alertan sobre posibles estafas con inmunosupresores
Los inmunosupresores se toman en la mañana y en la noche, pero con la escasez las personas han tenido que modificar su esquema, denunció la ONG. Eso puede ocasionar que la persona genere rechazo, dice Villamizar, porque el sistema inmunológico empieza a despertarse y ataca al órgano trasplantado.
La suspensión de los trasplantes tiene ya más de cinco años y sucedió en 2017 por esta misma situación, falta de medicamentos. Lo estamos alertando ahora para que no suceda. El Estado venezolano, Seguro Social y Ministerio de Salud deben hacer su trabajo», resaltó el director de ATV.
También señaló que Amigos Trasplantados de Venezuela, con ayuda de organismos internacionales, ha tratado de atender la escasez colaborando con medicamentos en las entidades donde la situación es más grave y hay emergencias. Denunció también que algunos de los medicamentos están vencidos.
Esta situación ha generado estafas con medicamentos en redes sociales, por lo que Villamizar invita a estar alerta a las personas trasplantadas. Algunas de sus recomendaciones son realizar tratos personales o a través de las organizaciones. Reymer invita al Estado a garantizar el derecho a la salud de manera oportuna.
Fuente: El Diario.