Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El director de la ONG rumana Padres Salvadores, Vasile Vlasin, ha denunciado al medio local PressHub la supuesta apropiación indebida por parte de ciudadanos rumanos de fondos destinados a apoyar a quienes acogen en sus propiedades a refugiados ucranianos.
En algunos de estos casos, asegura Vlasin, los beneficiarios de las ayudas alojan a refugiados pero no les dan el dinero que han recibido del Estado rumano para garantizar su manutención.
En otras situaciones quienes se aprovechan ni siquiera han acogido a refugiados y funcionarios municipales corruptos certifican, a cambio de un soborno, que los beneficiarios tienen viviendo en sus propiedades a ciudadanos ucranianos para que puedan cobrar la ayuda pública.
Medios rumanos han revelado en los últimos meses varios casos de corrupción de este tipo en diversas provincias del país, que acoge en estos momentos a unos 90.000 refugiados de Ucrania, nación con la que comparte más de 600 kilómetros de frontera.
El Estado rumano tiene un programa conocido como 50/20 por el que da a los ciudadanos rumanos que acojan a refugiados 50 leis diarios, unos 10 euros, por el alojamiento de cada refugiado y otros 20 leis, unos 4 euros, para su manutención.
Según el presidente de esta ONG que ha ayudado a numerosos refugiados de Ucrania, estas ayudas deberían ir directamente a los refugiados, pero el Gobierno rumano teme provocar el malestar entre la población al ofrecer dinero a ciudadanos extranjeros directamente.
Desde que comenzó la guerra, por Rumanía han pasado más de tres millones de refugiados ucranianos. La mayoría de ellos se ha establecido después en países de Europa central y occidental.
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