EFE | LA PRENSA.- El papa pidió hoy que las prisiones respeten la dignidad de los presos y fomenten su reinserción social, después de que 56 reos murieran ayer en un enfrentamiento entre bandas en una cárcel brasileña.
«Renuevo el llamamiento para que los institutos penitenciarios sean lugares de reeducación y de reinserción social, y las condiciones de vida de los detenidos sean dignas de personas humanas», dijo.
Francisco realizó estas reflexiones tras los saludos en diversas lenguas dirigidos a los miles de peregrinos que asistieron a la audiencia general que celebró hoy en el Aula Pablo VI del Vaticano.
Jorge Bergoglio expresó su «dolor y preocupación» por los sucesos ocurridos en una cárcel de Manaos, capital del estado de Amazonas, e invitó a los presentes a rezar «por los difuntos, por sus familias, por los reclusos y por los trabajadores» de las cárceles.
Durante la homilía, el papa centró su catequesis en la esperanza cristiana y señaló que «ante el dolor de los demás» se debe «mostrar una gran delicadeza y compartir su sufrimiento y su llanto», si se quiere que las palabras den «un poco de esperanza».
Para hablar de esperanza a quien está desesperado, es necesario compartir su desesperación (…). Si no es posible decir palabras con el llanto y el dolor, es mejor el silencio, es mejor la caricia y la ternura, y no decir palabra», agregó.