EFE | LA PRENSA DE LARA.- Normalidad en la constitución de las mesas y masiva afluencia de público en un día primaveral marcan las primeras horas del crucial referéndum obligatorio en el que este domingo 15 millones de chilenos decidirán si aprueban la nueva Constitución o por el contrario la rechazan y se mantienen la escrita en 1980, bajo la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
A las dos horas de la apertura oficial de los colegios ya se habían constituido todas las mesas en el territorio continental, y solo quedaban por hacerlo en la Isla de Pascua, con dos horas de retraso en el huso horario.
Los resultados está previsto que se conozcan unas dos horas después del cierre de las urnas, prevista para las 18.00 hora local (22.00 GMT), aunque ya se ha advertido que todos los ciudadanos que se encuentren en la fila a la hora del cierre podrán ejercer su derecho al votos, lo que podría retrasar el escrutinio.
En el interior y exterior de los colegios la sensación era de alegría, con largas filas y un proceso fluido que evitaba la exposición al sol, en un día caluroso, especialmente en la capital, donde se concentra la mayor cantidad del censo.
Aunque se espera que la mayor afluencia se produzca a medida que avance la jornada y se acerque la hora de cierre.
CONTINUIDAD DEL PROCESO
Uno de los primeros en acercarse alas urnas fue el presidente de la República, Gabriel Boric, quien lo hizo en Punta Arenas, su ciudad natal, junto a sus padres, su pareja, Iriana Karamanos, y uno de sus dos hermanos.
Boric subrayó que los «ojos del mundo están puertos en Chile», instó a la ciudadanía a votar «con alegría y responsabilidad» y advirtió que sea cual sea el resultado el país está preparado para seguir adelante con las reformas.
«Nos están mirando, desde todo el mundo, ejerzamos nuestro derecho y deber a escribir nuestra historia mediante el voto con responsabilidad, con tranquilidad, con calma y con mucha alegría y orgullo», propuso.
«Puedo garantizar que nuestra voluntad y nuestra acción independiente de cual sea el resultado, será convocar a una amplia unidad nacional de todos los sectores, de todas las organizaciones sociales, de la sociedad civil, de los partidos políticos, queremos escuchar todas las voces para poder seguir adelante con este proceso», subrayó.
DISPARIDAD ENTRE LOS EXPRESIDENTES
La más madrugadora, sin embargo, fue la expresidenta progresista Michelle Bachelet, quien votó en el consulado de Chile en Ginebra (Suiza), donde estaba empadronada en calidad de Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, cargo que dejó justo esta semana.