El legendario astronauta del Apolo 8, perdió la vida luego de que la avioneta en la que viajaba se estrellara cerca de Seattle.
Redacción | LA PRENSA DE LARA. – El renombrado ex astronauta del Apolo 8, William Anders, reconocido por capturar la icónica foto de la Tierra sobre el horizonte lunar en 1968, falleció trágicamente a los 90 años en un accidente aéreo en Seattle, cuando la avioneta en la que viajaba se estrelló. La NASA confirmó la trágica noticia.
Durante la misión Apolo 8 en 1968, Bill Anders dejó un legado imborrable al proporcionar a la humanidad uno de los regalos más profundos que un astronauta puede ofrecer.
«Viajó hasta el umbral de la Luna y nos ayudó a contemplarnos a nosotros mismos de una manera única», expresó Bill Nelson, el administrador de la NASA, a través de la cuenta oficial de la agencia.
«Anders personificó las lecciones y la esencia de la exploración. Su partida deja un vacío en nuestros corazones», añadió.
El trágico incidente ocurrió en las proximidades de Seattle, cerca de las islas Orcas y Johns en el estado de Washington, cuando la antiquísima avioneta en la que viajaba se sumergió en las aguas.
A pesar de los esfuerzos de la Guardia Costera y el equipo de rescate, el cuerpo del astronauta aún no ha sido hallado.
El 24 de diciembre de 1968, Anders junto a sus compañeros de misión, Frank Borman y Jim Lovell, marcaron un hito al ser los primeros en orbitar la Luna y presenciar la inolvidable imagen que capturaron en la famosa fotografía.
Anders, reconocido por la emblemática fotografía «Earthrise» que muestra la Tierra ascendiendo sobre el horizonte lunar, fue homenajeado en 2018 por la Unión Astronómica Internacional con la designación de un cráter en su honor, «Anders’ Earthrise».
La imagen revolucionaria permitió a la humanidad contemplar el planeta desde una perspectiva totalmente nueva.
En una emotiva entrevista en 2018, Anders compartió sus reflexiones al recordar aquel momento único: «Cuando la Tierra emergió sobre el horizonte lunar, me impactó profundamente la delicadeza y vivacidad de nuestro planeta».
Tras una carrera sobresaliente en la NASA, Anders se destacó en roles gubernamentales y lejos de la Tierra, asumiendo cargos como embajador de Estados Unidos en Noruega tras su retiro de la agencia espacial.