EFE | LA PRENSA.- Juan Orlando Hernández se convirtió hoy en el 55º presidente de Honduras y el primero en ser reelegido desde que su país retornó a la democracia en 1980, en un ambiente marcado por el rechazo de la oposición que aduce que ganó con fraude las elecciones generales de 2017.
El gobernante fue reelegido el 26 de noviembre del año pasado en unos comicios reñidos que dejaron al descubierto la profunda polarización del país centroamericano, que tiene entre sus mayores enemigos la pobreza, el desempleo, el narcotráfico y la corrupción.
Abogado de profesión y empresario, Hernández, de 49 años, llegó a la silla presidencial con el triunfo que obtuvo en las elecciones de 2013 de la mano del Partido Nacional, al que le dio una tercera victoria consecutiva, esta vez en medio de la polémica porque la Constitución prohíbe la reelección presidencial.
Pero un fallo judicial de 2015 dejó abierta esa posibilidad, que Hernández aprovechó y cristalizó en los comicios del 26 de noviembre pasado, al obtener el 42,95 % de los votos frente al 41,24 % del opositor Salvador Nasralla, que gritó “fraude” y no acepta los resultados del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Hernández, nacido el 28 de octubre de 1968 en la aldea Río Grande, del departamento de Lempira, en el occidente de Honduras, tiene una larga carrera política a cuestas.
El reelegido presidente fue diputado en el Parlamento local desde 1998 hasta el 2013. En el Legislativo ejerció varios cargos, hasta el de presidente, de 2010 a 2014.
En noviembre de 2013 fue el candidato a la presidencia del país por el Partido Nacional y se impuso a Xiomara Castro, del Libertad y Refundación (LIBRE), surgido luego del golpe de Estado del 28 de junio de 2009 que derrocó al entonces gobernante Manuel Zelaya.