El objetivo para 2030 es erradicar el hambre
EFE | LA PRENSA DE LARA.- El director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Qu Dongyu, instó a centrarse en las personas más vulnerables para garantizar que «no se quede nadie atrás» en América Latina y el Caribe.
En la inauguración de la 38 Conferencia Regional de la FAO, Qu enfatizó: «Las personas más vulnerables se ven más afectadas por los desafíos que enfrentamos. Ellos tienen que ocupar el centro de nuestras intervenciones para que no se quede nadie atrás».
Qu resaltó la importancia de utilizar datos precisos para mejorar la toma de decisiones y monitorear las tendencias que permiten anticipar fluctuaciones de precios en productos básicos y alimentos. En este sentido, mencionó: «Utilizar datos oportunos y acertados es fundamental para mejorar la toma de decisiones, al igual que el monitoreo de tendencias que permiten anticipar las fluctuaciones de precios en productos básicos y alimentos».
A pesar del objetivo para 2030 de erradicar el hambre, aún hay 43 millones de personas en la región que sufren de inseguridad alimentaria. Qu identificó varios desafíos, como la ralentización económica, la volatilidad de precios de productos básicos, los altos costos de los alimentos y el impacto del cambio climático.
El director general abogó por promover el desarrollo local, las tecnologías innovadoras y la resiliencia para hacer frente a estos desafíos complejos. Destacó iniciativas regionales exitosas, como la lucha contra el hambre en Brasil y la reducción de la importación de alimentos en la Comunidad del Caribe (Caricom).
Qu señaló que la región de América Latina y el Caribe tiene un papel crucial en avanzar en estos temas a nivel mundial, dado su rico patrimonio natural y su contribución al suministro global de alimentos. En este sentido, afirmó: «La región de América Latina y el Caribe está bien posicionada para impulsar avances mundiales en estos temas».
La conferencia regional es una plataforma importante para que los Estados miembros compartan ideas, conocimientos y soluciones innovadoras para abordar los desafíos que enfrenta la región. Las prioridades incluyen la producción eficiente, inclusiva y sostenible; la seguridad alimentaria y nutrición; la gestión sostenible de recursos naturales; y la adaptación a la crisis climática, así como la reducción de desigualdades, pobreza y promoción de la resiliencia.
Información: San Juan, 18 mar& ;