El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el ministro de Relaciones Exteriores de Paraguay, Rubén Ramírez Lezcano, firmaron este jueves un memorando para reforzar la cooperación contra la inmigración irregular. El acuerdo, que busca detener la llegada de migrantes a la frontera estadounidense, ha sido calificado como un «gran paso» en la agenda de seguridad de la administración de Donald Trump.
Rubio, en su visita a Paraguay, definió el memorando como un «gran día para reafirmar lazos» entre ambas naciones, que comparten una preocupación por la «inmigración irregular». El secretario de Estado, quien estuvo acompañado por el subsecretario de Seguridad Nacional, Troy Edgar, agradeció al presidente paraguayo, Santiago Peña, por su liderazgo en la lucha contra la inmigración ilegal.


A través de su cuenta en X, Rubio explicó que el acuerdo es un «Acuerdo de Tercer País Seguro», lo que permitirá a los solicitantes de asilo en Estados Unidos presentar sus solicitudes de protección en Paraguay. «Agradecemos al presidente Santiago Peña su liderazgo en la lucha contra la inmigración ilegal y su colaboración para crear un hemisferio más seguro», agregó el alto funcionario.
Por su parte, el ministro Ramírez Lezcano destacó que el acuerdo va más allá de la política migratoria y abarca otros aspectos como la seguridad, el comercio y las inversiones. «Estamos trabajando en una amplia agenda bilateral», afirmó, señalando que ambos países comparten valores como la democracia, la libertad y los derechos humanos.
El subsecretario de Seguridad Nacional, Troy Edgar, aseguró que este acuerdo es un «gran paso» en los planes de la administración de Trump para que terceros países colaboren en frenar la entrada de inmigrantes. Edgar argumentó que el sistema de asilo estadounidense fue objeto de un «abuso» en el pasado y que este nuevo convenio «alivia la carga» para procesar a las personas que realmente merecen el asilo.