Agencias | LA PRENSA DE LARA.- Al menos cinco personas murieron y varias resultaron heridas este miércoles en un tiroteo ocurrido en un hospital de la ciudad estadounidense de Tulsa (Oklahoma), en el que el agresor perdió la vida, informó la Policía local.
«Tenemos cuatro civiles que están muertos y tenemos un tirador que está muerto», dijo el vicedirector de la policía de Tulsa, Jonathan Brooks a los medios tras el último de una serie de tiroteos masivos en Estados Unidos. Brooks especificó que las primeras investigaciones apuntan a que el agresor se disparó a sí mismo.
El autor de los disparos también ha muerto, según la Policía, pero no estaba claro cómo. Los agentes seguían trabajando para despejar el campus del Hospital Saint Francis, y estaba prevista una rueda de prensa a las 19.15 hora local.
Según aseguró el concejal del Ayuntamiento Jayme Fowler al canal CNN, el asaltante, que portaba un rifle y una pistola, estaba buscando a un médico que trabajaba en lugar, extremo que la Policía no ha confirmado.
El capitán Richard Meulenberg dijo a ABC News que la Policía de Tulsa recibió una llamada sobre un hombre con un rifle en el segundo piso de un edificio del campus médico y que «se convirtió en una situación de tirador activo».
Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, «se encontraron con que algunas personas habían recibido disparos». Un par de ellas estaban muertas en ese momento», dijo Meulenberg.
«También encontramos a quien creíamos que era el tirador y seguimos creyendo que es el tirador, porque llevaba un rifle largo y una pistola», añ;adió Meulenberg.
La Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden había sido informado sobre el tiroteo y que está «siguiendo de cerca la situación y se ha puesto en contacto con funcionarios estatales y locales para ofrecerles apoyo.»
El tiroteo de Tulsa se produce después de dos tiroteos masivos ocurridos en mayo que conmocionaron a los estadounidenses y reavivaron los debates sobre el control de las armas. La semana pasada, un hombre armado mató a 19 niñ;os y dos profesores en una escuela primaria de Uvalde (Texas). A principios de mayo, un tirador mató a 10 personas en un supermercado de Buffalo (Nueva York).