EFE | LA PRENSA DE LARA.- Los muertos causados por las lluvias torrenciales desde el día 16 en la India y Nepal aumentaron este jueves a 188, mientras las labores de búsqueda y rescate continúan en ambos países y las autoridades advierten del riesgo de nuevas precipitaciones en algunas zonas.
Las lluvias, que llegan cuando las agencias gubernamentales y los expertos daban por finalizada la época del monzón, han causado sorpresa por su virulencia.
Récord de fallecimientos en Nepal
Las autoridades nepalíes elevaron hoy a 101 las muertes causadas por las lluvias torrenciales y los deslizamientos de tierra en los últimos días.
«Se trata del mayor número de víctimas registrados nunca (por las lluvias) en el mes de octubre», dijo a Efe el portavoz del Ministerio del Interior, Phanindra Mani Pokharel.
Además, 30 personas continúan desaparecidas y 22 resultaron heridas graves durante los diferentes deslizamientos de tierra e inundaciones que han afectado a una veintena de distritos del país desde el fin de semana pasado, señaló el Gobierno.
La temporada de lluvias asociada al monzón suele afectar a Nepal desde el comienzo de junio hasta el final de septiembre y se cobra cada año la vida de decenas de personas, pero Nepal ha registrado un inusual récord de precipitaciones en octubre que han causado también importantes daños materiales.
Según las autoridades nepalíes, al menos 2.232 casas han sufrido inundaciones y 1.177 familias han sido desplazadas.
Equipos de emergencia de la Cruz Roja se han desplazado a las zonas más afectadas por las fuertes precipitaciones, donde «están trabajando sin descanso para evacuar a los supervivientes y brindar una ayuda fundamental a miles» de afectados, aseguró el jefe de la delegación en Nepal de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR), Azmat Ulla.
«Con el pronóstico de más tormentas y fuertes lluvias, necesitamos acceder lo antes posible a las comunidades remotas y más afectadas para proporcionar artículos de socorro», afirmó Ulla, según un comunicado de la FICR, en el que destacó la difícil situación de la población tras la destrucción de hogares y cultivos.
Importantes daños agrícolas
Las fuertes lluvias han causado además la muerte de al menos 140 cabezas de ganado y han dañado importantes zonas de cultivo.
Ram Kamal Chaudhary, un granjero en la localidad limítrofe con la India de Lumbini, afirmó a Efe que su plantación de 1,3 hectáreas de arroz ha sido completamente destruida.
«Estaba esperando una cosecha abundante en unas pocas semanas, pero las lluvias han arruinado todo», dijo.
Como Chaudhary, miles de agricultores en todo el país han sufrido pérdidas que podrían sumar un total de 10.000 millones de rupias nepalíes (unos 84 millones de dólares), dijo a Efe el portavoz del Ministerio de Agricultura y Ganadería, Prakash Kumar Sanjel.
«Estamos trabajando en un paquete de ayuda que sea distribuido directamente en forma de efectivo o como subsidios a las semillas y los fertilizantes en la próxima cosecha», dijo Sanjel.
Los expertos consideran que las lluvias torrenciales han agravado el daño causado a la economía nepalí por la pandemia del coronavirus, que redujo el crecimiento en sectores importantes como el turismo y los servicios.
El Banco Asiático de Desarrollo auguró recientemente un crecimiento del producto interior bruto del 4,1 % para el actual año fiscal, frente al 5,1 % proyectado anteriormente.
«La tasa de crecimiento del país podría disminuir un 0,5 % más según los datos preliminares», dijo a Efe el economista Keshav Acharya.
52 muertos en el norte de la India
En la vecina India, el número total de muertos por las lluvias que han golpeado el norte y el sur de el país en la última semana asciende ya a 87.
En el estado norteño de Uttarakhand, donde las inundaciones y deslizamientos de tierra han provocado desde el lunes el corte de carreteras y numerosos derrumbes, las autoridades elevaron los fallecidos a 52, mientras cinco personas siguen desaparecidas, informó el medio local Indian Express.
Las lluvias dieron ayer y hoy una tregua al estado indio, tras días de precipitaciones continuas.
En la región sureña de Kerala, sin embargo, el Departamento de Meteorología de la India (IMD, en inglés) ha advertido este jueves de que numerosos distritos recibirán de nuevo fuertes precipitaciones a partir de mañana.
Ocho distritos se encuentran en alerta naranja, y las autoridades han pedido a los pescadores que no se adentren en el mar mientras evacúan a habitantes de zonas inundables.
Las fuertes precipitaciones dejaron al menos 35 muertos en Kerala, así como fuertes daños materiales.