EFE | LA PRENSA.- La Policía británica capturó “a la mayor parte de la red” vinculada al atentado terrorista del pasado lunes en Manchester, aunque se prevén más detenciones, declaró hoy el comisario adjunto de la Unidad nacional antiterrorista, Mark Rowley.
Rowley precisó que se han hecho inmensos progresos en la labor policial, si bien quedan abiertas importantes líneas de investigación.
La policía interroga actualmente a ocho hombres de entre 18 y 38 años de edad sospechosos de vinculación con el hecho, tras haber puesto en libertad sin cargos a un adolescente de 16 años y a una mujer de 34 años de edad.
Las fuerzas de seguridad tratan de desmantelar la red que presuntamente apoyó al terrorista suicida Salman Abedi, un británico de origen libio de 22 años de edad que detonó una bomba casera en el estadio Manchester Arena, a la salida de un concierto de Ariana Grande lleno de adolescentes, causando 22 muertos y 64 heridos.
Además de los detenidos en el Reino Unido, entre los que se encuentra un hermano del agresor -Ismail Abedi, de 23 años de edad-, en Libia han sido arrestados el padre, Ramadán Abedi, y otro hermano, Hashim, de 20 años de edad.
Ramadán y Hashim Abedi fueron apresados esta semana por una patrulla de las Fuerzas Especiales de Disuasión (RADA), una de las milicias más poderosas de Trípoli afín al gobierno de unidad que sostiene la ONU.
Los analistas libios creen que Ramadán Abedi perteneció al Grupo Islámico de Combate Libio (LIFG), una organización vinculada a la red Al Qaeda que participó en 2011 en la revolución contra el dictador Muamar el Gadafi y algunos de cuyos militantes supuestamente vivieron durante años refugiados en el Reino Unido.
Tras el atentado del lunes, el peor en la historia de Manchester, el gobierno británico elevó a “crítico”, el más alto, el nivel de alerta terrorista, y desplegó a un millar de soldados para asistir a la policía en sus labores de vigilancia.