Agencias | LA PRENSA DE LARA.- El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, se mostró convencido de que la decisión de enviar una Misión de Observación Electoral de los Veintisiete a Venezuela fue la «correcta» y contribuirá a ayudar a encontrar una solución a la crisis a través del diálogo político.
«Enviar esta misión fue una decisión controvertida, sin embargo estoy convencido de que contribuirá a ayudar a encontrar una solución a la crisis venezolana a través del diálogo político», afirmó Borrell en un artículo publicado este martes en su blog «Una ventana al mundo».
En sus conclusiones sobre las elecciones regionales y municipales del país celebradas el 21 de noviembre presentadas hace una semana, los responsables de la MOE, la portuguesa Isabel Santos y el español Jordi Cañas, reconocieron «algunas mejoras concretas» en el proceso electoral, pero destacaron que persisten «importantes problemas estructurales», recordó.
El jefe de la diplomacia europea precisó que esos problemas son la falta de independencia judicial y el incumplimiento del estado de derecho, el uso de recursos estatales para campañas políticas, una serie de descalificaciones políticas arbitrarias de candidatos y falta de independencia de los medios.
Todo eso afectó la igualdad de condiciones y la equidad y transparencia de las elecciones, indicó.
Ni «policías electorales» ni «espías»
Pese a las controversias que han rodeado el envío de esta MOE a Venezuela, Borrell se mostró convencido de que «la decisión de ir a observar fue la correcta».
«Fue útil para el pueblo venezolano y permite a la UE y a la comunidad internacional evaluar mejor los hechos en el país», aseguró.
La contribución más importante de esta misión, añadió el político español, serán sus recomendaciones finales para futuras elecciones, que se compartirán a principios de 2022.
«Cómo organizar elecciones libres y justas es de hecho uno de los temas clave para cualquier solución negociada políticamente a la crisis venezolana», consideró el alto representante de la UE para la Política Exterior.
En cualquier caso, mantuvo, la Unión Europea continuará sus esfuerzos para ayudar a lograr la reconciliación y la «reinstitucionalización» en Venezuela «para aliviar el dolor que sufren los venezolanos».
En su artículo, Borrell quiso aclarar el papel de los observadores electorales, que no son «policías electorales».
No están en Venezuela «para legitimar o deslegitimar una elección y declarar si era libre y justa», remarcó.
Las MOE de la UE, explicó, están «diseñadas para proporcionar conclusiones objetivas sobre cómo se lleva a cabo un proceso electoral, basándose en las normas democráticas internacionales que el país ha suscrito. Y constituye la base de un conjunto de recomendaciones que pueden ayudar a mejorar los procesos electorales futuros».
Además, subrayó que aunque el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha declarado que los miembros de la MOE eran «espías» que habían ido a desacreditar las elecciones, «el hecho de que la misión fue bien recibida por una gran mayoría de venezolanos en el terreno y que respondieron positivamente a su declaración preliminar sugiere que la decisión de ir a observar fue la correcta».
La participación en las elecciones del pasado día 21 fue solo del 42,5 % de los venezolanos con derecho a voto, la más baja de los últimos 25 años.
Según el Consejo Nacional Electoral, las fuerzas políticas del gobierno pro Maduro ganaron 20 gobernadores de 23 y 212 alcaldes de 335, aunque -destacó Borrell- la mayoría de los votos se destinaron a opciones no progubernamentales.
Constató que la fragmentación de la oposición ha limitado su capacidad para capitalizar estos votos.
EFE