LA PRENSA DE LARA | EFE.- El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, afirmó este jueves que Rusia «ya ha perdido» la guerra contra Ucrania, si bien reconoció que Kyiv «todavía no ha ganado».
«Es una guerra sangrienta, pero Rusia ya ha perdido esta guerra. Ucrania todavía no ha ganado, pero Rusia claramente está militarmente derrotada», declaró el político durante la Cumbre Europea de Defensa y Seguridad que se celebra hoy en Bruselas.
Borrell recalcó que el ejército ruso «ha sido derrotado» porque fracasó en su intento de conquistar Kyiv «en un par de semanas» y porque no ha logrado tomar la ciudad de Bajmut.
El exministro españ;ol también pidió «tener cuidado» para no «dividir el mundo entre Occidente y el resto» porque Rusia «estaría muy contenta» si pudiera decir que «el resto del mundo» está de su parte.
«Mucha gente no es suficientemente contundente en la condena de Rusia. Votaron en Naciones Unidas contra Rusia, (…;) pero después oigo a algunos líderes del mundo que no son lo suficientemente contundentes en la condena de la agresión rusa contra Ucrania», expuso.
En referencia a las personas que piden la paz en Ucrania, Borrell subrayó que él también la desea y que «los que más la quieren» son los propios habitantes del país, que son «bombardeados a diario».
«No me digas que quieres la paz, dime cómo quieres la paz y qué tipo de paz quieres. Conozco un modo de detener la guerra: dejar de apoyar a Ucrania», manifestó, ya que «sin el apoyo europeo, Ucrania no se puede defender por sí misma».
«¿;Qué quieres? ¿;Quieres eso? Porque la gente me dice que deje de apoyar a Ucrania y, entonces, las negociaciones empezarán y vendrá la paz. Venga. Si dejamos de apoyar a Ucrania, Rusia ganará la guerra, ocupará Kyiv, convertirá Ucrania en una segunda Bielorrusia, tendremos tropas rusas en la frontera polaca, nuestra inseguridad incrementará y Ucrania no existirá», trasladó.
Añ;adió que lo que más le preocupa es que personas con ideología de izquierdas digan que se está alimentando la guerra al donar armas a Ucrania.
«Estoy prolongando la guerra (al apoyar a Kyiv) porque Ucrania es capaz de defenderse. No entiendes que si dejamos de apoyar a Ucrania, Ucrania desaparecerá como un país libre e independiente», comentó.
Indicó que la UE «está preparada para las negociaciones de paz», pero recordó que todos los líderes que han visitado en Moscú al presidente ruso, Vladímir Putin, han vuelto diciendo que el mandatario afirma tener «un objetivo militar».
Asimismo, apuntó que Europa «necesita una industria de la defensa más fuerte».
Constató que no es un admirador del expresidente estadounidense Donald Trump, pero reconoció que estaba «en lo cierto» cuando insistía en que los europeos «no asumen su parte de la carga» en la defensa.
Por otro lado, afirmó que todos los países vecinos de Rusia «querrían ser parte de la OTAN».
«Pero es la culpa de Rusia, no de la OTAN», aseveró.
Sobre la relación entre China y Rusia, consideró que «la amistad sin límites» entre ellos «tiene límites».
«Es una pareja muy desequilibrada. Rusia representa el 1 % de la economía mundial. (…;) China es más del 20 %», evidenció.
Señ;aló que Pekín «está apoyando a Rusia», pero aseguró que «por el momento» no está proporcionando respaldo militar a Moscú.
«Tenemos que estar vigilantes y no tenemos interés alguno en empujar a Rusia a los brazos de China, pero no creo que China se sienta muy cómoda con lo que está sucediendo», declaró.
Aseguró que en el conflicto entre Rusia y Ucrania, China presenta una posición de «neutralidad prorrusa».
Detalló que el club comunitario ha dejado de comprar gas ruso y que Moscú no puede vender esa fuente de energía a China porque «está demasiado lejos».
«Rusia va a tener grandes problemas para conseguir el dinero que recibían de nosotros. China no es un sustituto», expresó.
Añ;adió que lo «importante» no es «evitar que China se convierta en una potencia global», sino «gestionar cómo China utilizará ese poder».