EFE | LA PRENSA.- Al menos doce personas murieron y 39 resultaron heridas en los ataques terroristas perpetrados hoy contra el Parlamento iraní y el mausoleo del imán Ruholá Jomeiní en Teherán, según los servicios de emergencia.
Las fuerzas de seguridad iraníes lograron tras casi cinco horas controlar la situación en los dos lugares blanco de ataques, cuya autoría fue asumida por el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
Aunque los servicios de emergencia no precisaron el ataque en el que perecieron las víctimas, los datos facilitados hasta el momento apuntan a que la mayor masacre fue cometida en el Parlamento.
En el mausoleo, los medios oficiales informaron de la muerte de un empleado del recinto y de que cuatro peregrinos habían sufrido heridas.
Los terroristas irrumpieron en ambos lugares con fusiles Kalashnikov, pistolas y explosivos, y en la asamblea llegaron a tomar varios rehenes.
Se calcula que al menos ocho terroristas participaron en los ataques, algunos de los cuales se inmolaron, otros fueron abatidos por la policía y otros acabaron detenidos.
Las operaciones de seguridad llevaron tiempo sobre todo en el Parlamento, situado en el centro de Teherán, debido al gran número de civiles atrapados y tomados como rehenes.
Los accesos a la asamblea fueron totalmente acordonados y cerrados por la policía en un ambiente de gran tensión, según pudo constatar Efe.
Es el primer ataque de este tipo que se produce en Irán, cuyas autoridades han reforzado las medidas de seguridad en torno a los edificios oficiales como la sede de la Presidencia.