Expertos hacen un llamado a hidratar a los animales de la calle, ya que son los más vulnerables
Andrea Barrios | LA PRENSA DE LARA.- Estrés, shock térmico, deshidratación y cambio de hábitos son algunas de las consecuencias que pueden sufrir los animales debido a la altas temperaturas en Venezuela y que podrán alcanzar los 40º entre el 21 de marzo y el 2 de mayo, según el especialista en meteorología, Luis Vargas, quien proyectó que la coincidencia entre el fenómeno El Niño y la declinación solar pueden llevar al 2024 a batir récord de temperatura en la última década, situación que así como afecta a los humanos afecta a los animales.
Ante esta realidad, el veterinario, Rogmil González, explicó que los órganos de todo ser vivo están adaptados o funcionan con una temperatura promedio que variará dependiendo de la especie, al ésta incrementarse excesivamente los órganos empiezan a presentar disfuncionalidad, entre ellas puede ocurrir deterioro en el sistema nervioso, sistema respiratorio y hasta el sistema renal, todo promovido por los altos picos de estrés que se producen en el animal, ya que no se encuentra en confort.
El experto señala que cada especie tiene su propio termorregulador, que comúnmente se equilibra a través de la respiración. Sin embargo, cuando la autorregulación no funciona hay signos que permiten determinar el momento en el que el animal está sufriendo un cuadro de estrés, tales como: aumento de la respiración, salivación excesiva y sudoración en algunas especies, como ganado vacuno, ovejas, cabras y caballos.
A estos síntomas de estrés, el también veterinario, Luis Lugo, le agregó el incremento de la ingesta de agua y cambio de hábitos al momento de comer, es decir, si el animal tiene un horario para su alimentación y a la hora que le correspondía comer decidió no hacerlo, podría ser por estrés y fatiga, por lo que recomienda mantener una alerta constante ante las altas temperaturas.
Recomendaciones
Para enfrentar esta realidad, los expertos aconsejan pasear a las mascotas sólo en horas de la mañana y al final del día para evitar que se quemen las almohadillas de las patas que están totalmente expuestas al suelo, surtir sus recipientes con agua fría, brindar una buena alimentación y mantenerlos bajo sombra, de ser posible en habitaciones con aires acondicionado o donde puedan contar con un ventilador.
De persistir el comportamiento irregular del animal, llevarlo al veterinario es la mejor opción, pues especies con deficiencia respiratoria o alguna enfermedad previa podría presentar un golpe de calor o shock térmico que lo pondría en riesgo.
Los de la calle
La situación no sólo acoge a los animales en el hogar. Carolina Aponte, representante del proyecto Cola Feliz, insta a brindar hidratación y comida a los animales que viven en la calle.