Víctor Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- El transporte ha sido caldo de cultivo para la propagación del Covid-19 en la entidad crepuscular ya que no se respetan las medidas de bioseguridad establecidas por los organismos internacionales de la salud.
Unidades de transporte público a diario -sea semana de cuarentena radical o flexible- se ven abarrotadas debido al escaso número de carros, camionetas y busetas que pueden trabajar, esto trae como consecuencia que las que están operativas tengan que llevar a la mayor parte de pasajeros posibles para que estos puedan llegar a sus destinos.
«Faltan más unidades operativas, es bueno que vuelvan los famosos ‘matacolas’. Las unidades de Transbarca sobran en el terminal pero no las sacan a trabajar. De paso que el servicio es malo, los choferes son groseros y mal educados», dijo Juan Ruiz criticando duramente este órgano de transporte en el estado.
Muchos han denunciado que el uso del tapaboca no está siendo usado de manera correcta al subir a una unidad y hacer respetar las medidas que deberían ser exigidas por el encargado del medio de transporte ya que debe cuidarse a si mismo y a los demás pasajeros.
«No se cumplen con las medidas de bioseguridad, en todas las unidades de Transbarca se ve mucha aglomeración, no hay distanciamiento requerido y tampoco la desinfección al subir a una unidad de transporte», manifestó Eduardo Nieves mientras esperaba por un ruta en la avenida Venezuela.
El repunte de los casos se ha acelerado en Lara y uno de las principales focos de contagios es el transporte público y comercios donde no se hacen respetar las medidas.