Jennifer Orozco | La Prensa.- Aproximadamente, 60 personas entre hombres y mujeres de todas las edades llegan mensualmente hasta las puertas del comedor del Liceo Lisandro Alvarado, el cual es el centro de acopio del PAE para el circuito Pío Tamayo de la parroquia Concepción, su objetivo es agarrar “el sobrante” del PAE y llevarlo a sus casas.
Dilia Escalona, vocera del Consejo Comunal Luisa Cáceres de Arismendi, explica que todos los meses se hace la entrega controlada de la comida para 67 escuelas. Los alimentos llegan en camiones 350 a las 7:00 de la mañana y el día que eso sucede pasan hasta la tarde contando y surtiendo los camiones para las escuelas del circuito.
Cuando ese proceso culmina, supervisado por la directora, coordinadores, comunidad y funcionarios de la GNB, dejan pasar a la gente que se aglomera en la cerca para que se lleven “el repele”, sobre todo verduras y frutas.
“La cosa está dura y todos los meses venimos a recoger aquí si queda algo”, dijo un señor de unos 70 años, aproximadamente.
Ninguna persona de la comunidad quiso hablar, pues decían que les daba pena estar esperando en la puerta. Esta es la sexta vez que sucede esto.