Osman Rojas | LA PRENSA.- Sacarse la sangre en los hospitales públicos es cosa del pasado. Desde hace aproximadamente dos años, los centros de salud en Lara se han quedado sin reactivos para atender a sus pacientes.
En algunos casos como el Hospital Central la situación es un poco más dramática pues se llevaron hasta las máquinas del laboratorio.
“Parece mentira que en Venezuela pasen estas cosas. Los pacientes aquí sufren una barbaridad para poder pagar sus exámenes y el gobierno no toma cartas en el asunto”, dijo César Ribas, coordinador de Lara Entera por la Salud.
El doctor dijo que, ni siquiera el Pastor Oropeza, institución que ha sido vendida como hospital modelo, tiene reactivos para atender a los enfermos.
“Son cerca de 700 enfermos diarios los que se ven afectados por esta problemática. Aquí no hay material ni siquiera para una hematología completa y eso es realmente alarmante”, dijo.
Se compromete
El clamor de los bioanalistas en Lara fue escuchado. La gobernadora Carmen Meléndez se comprometió este miércoles con solucionar los problemas de laboratorio que hay en los hospitales de la región.
“Ya tomamos nota y vamos a girar instrucciones para habilitar los laboratorios. Anteriormente aquí habían equipos alquilados, pero nosotros traeremos aparatos que sean nuestros”, dijo la almiranta en un acto realizado en el pediátrico.