Euseglimar Gonzales | LA PRENSA.- Tremenda sorpresa se llevó ayer una docente del preescolar Ciudad de Maturín, en San José, cuando entró a la oficina a buscar el dinero que tenía para cubrir los gastos de copias y papelería para el plantel educativo.
Apenas la maestra abrió la puerta se dio cuenta que habían robado, pues estaba violentado el candado del archivero y en una mesa dejaron el cofre en donde estaban los 11 mil bolívares.
Al parecer los malandros entraron por la separación que hay entre el techo y la pared de uno de los baños de la institución. En la pared quedaron huellas de las manos y marcas de suelas de zapatos.
“Me iba a llevar el dinero hoy a mi casa para no dejarlo aquí en vacaciones y el hampa se adelantó”, contó la docente, quien no quiso identificarse por temor a que los malandros le hagan daño.
Las maestras contaron que en el año escolar 2015-2016 fueron robados tres veces. El preescolar se comunica con la escuela y liceo que tienen el mismo nombre, Ciudad de Maturín, pero estos no fueron robados.