William Croes A. | LA PRENSA.- Miembros de Fupsotradeven, uno de los sindicatos que conforman el bloque bolivariano de transporte, realizaron una toma pacífica en las puertas de la proveeduría para exigir el cese de los chanchullos en el centro de despacho de repuestos y unidades, y una justa distribución donde se tome en cuenta a verdaderos transportistas y no a
representantes políticos y a sus familiares.
Desde las 7:30 am, los representantes del sindicato que está integrado básicamente por líneas de taxi se concentraron en la entrada de la instalación sin permitir el acceso de los trabajadores
como una medida de presión. La intención era sostener una reunión pública con Nelson Torcate, director de la proveeduría que abastece de cauchos, baterías y lubricantes a las representaciones sindicales del transporte público.
Tenemos siete meses sin recibir repuestos, hay un grupo corrupto que se ha apropiado de los insumos con el beneplácito del ingeniero Nelson Torcate, quien tiene una marcada preferencia por
otras representaciones sindicales bolivarianas”, argumenta Aniviv Quiroz, representante del sindicato cuyos miembros están pasando aceite por la falta de cauchos y baterías.
El último censo emprendido por representantes de la fuerza sindical registra que tienen un 70% de unidades paralizadas. La mayoría de ellas son carros que tienen más de 10 años, por lo cual superaron su vida útil y es indispensable un cambio de unidades por las nuevas que están estacionadas en el patio de Transbarca.
Mientras nuestros asociados tienen carros viejos, los taxis y autobuses se los reparten a concejales y miembros del buró político del PSUV. Para nadie es un secreto que hay más de un concejal que anda a sus anchas con carros que deben estar en manos de verdaderos transportistas”, expresa Quiroz, quien señala que tiene sustentada su denuncia.
Los representantes sindicales también manifestaron su queja abierta con la manera de dirigir la proveeduría por parte de Torcate. Señalan que, desde que tomó las riendas de una parte de la
distribución de comida por los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) ha descuidado la dotación de insumos al punto que no se han reunido más para planificar las próximas
entregas.
Transportistas bolivarianos que en su momento han defendido a Torcate de acusaciones, se suman a las quejas de otros sindicatos.