Osman Rojas | LA PRENSA.- Atravesando piedras, quemando palos y gritando “¡Queremos luz!”, los habitantes de la comunidad Las Cocuizas, en Carorita, cerraron la carretera vieja que comunica con Barquisimeto para exigir que se les restablezca el servicio eléctrico, pues tienen tres días a oscuras por la explosión de un transformador.
Los habitantes de la zona no comieron cuento y desde las 6:00 de la mañana se concentraron en la entrada de la urbanización Brisas de Carorita para protestar y presionar a las autoridades. “Llegó La Prensa, pero de aquí no nos vamos hasta que llegue Corpoelec”, soltó la señora Aura Silva, una de las afectadas por el corte de luz.
Los manifestantes tomaron la decisión de salir a la calle luego de que Corpoelec les dijera el pasado jueves que para ellos no había transformadores por vivir en una invasión y por tener una toma ilegal de corriente. Lo que más molestó a los habitantes de Las Cocuizas es que en la empresa eléctrica les advirtieron que si querían que se les colocase el transformador tenían que pagar 1.2 millones de bolívares.
“Nos quieren marginar porque vivimos en ranchos, pero a nosotros nadie nos pisa. Aquí estamos exigiendo nuestros derechos porque no es justo con los niños, ellos son los que más sufren. Yo tengo un pequeño de dos meses que está comido por los zancudos porque no tengo ventilador para ponerle”, dijo con rabia Felicmar Cordero, una de las manifestantes.
La explosión del transformador mantiene a 800 habitantes de la zona sin energía eléctrica, según contaron los propios manifestantes.
A punto de tángana
La protesta realizada por los habitantes de Las Cocuizas no cayó bien en los residentes de la urbanización Brisas de Carorita, quienes no pudieron sacar sus carros por miedo a que les cayeran a pedradas.
“Estamos secuestrados por esta gente. Son unos vándalos, cómo es posible que nos reclamen en la puerta de la urbanización y no se vayan a Corpoelec, quienes son los que realmente deben solucionarles”, soltó molesto Pedro Almerida, residente de Brisas de Carorita, quien estaba esperando desde las 8:00 am que abrieran la vía para salir a hacer diligencias.
A las 9:36 de la mañana, una delegación de la Guardia Nacional llegó hasta la manifestación y tanto vecinos como manifestantes casi se van a los golpes mientras cada uno explicaba su versión de la problemática.
Al final los uniformados pudieron controlar la situación. Los manifestantes levantaron la protesta pasadas las 11:30 de la mañana. Al cierre de esta edición nadie les había dado respuesta a los afectados y por eso decidieron conectar cables desde la guaya central para robar la luz hasta que Corpoelec se apersone en el sitio y les solvente.