Leidi Reyes | LA PRENSA DE LARA.- Se mantienen con ánimo y fuerza para exigir sus derechos, a pesar de su avanzada edad y sus condiciones de salud.& ;
Profesores, obreros y jubilados son quienes permanecen, frente al rectorado de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (Ucla), durante el segundo día de ayuno intermitente.& ;
«Estamos aquí para hacer un llamado al Gobierno nacional, exigimos que cese la violación de los derechos. ¡Basta de pisotear nuestra dignidad!», protestó el sargento jubilado Saulo Freites.& ;
El inicio de la protesta pacífica es a las 9:30 am hasta las 2:30 pm, se tiene previsto que la actividad sea hasta el viernes. Sin embargo, seguirán con la protesta creativa, como es denominada por ellos, en el caso de no obtener respuestas satisfactorias.& ;& ;
«Si es de continuar e intensificar el ayuno lo haremos. Seguiremos en lucha hasta que se tome en cuenta a los empleados de todos los sectores; necesitamos mejorar nuestra condición de vida», afirma Freites.& ;
Euclides Durán, del sindicato único nacional de empleados públicos del ministerio de salud, revela que se priva de alimentos como señal de protesta ante las políticas salariales y los atropellos que viven todas las personas de la tercera edad.
«El Gobierno quiere que nos acostumbremos y no lo vamos a permitir porque cada día se destruye el poder adquisitivo de la familia venezolana, nuestra lucha seguirá mientras el presidente sea indolente con todos los trabajadores públicos», sentencia.& ;
José Lucena, secretario de reclamos del sindicato de obreros de la Ucla, precisa que el ejecutivo nacional viola el articulo 80 y 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.& ;
«Pareciera que los trabajadores y las personas de la tercera edad no tuviéramos derechos pero nos mantendremos de pie porque la victoria es de los que no se rinden», afirma.& ;
Nelson Freites, profesor y coordinador de la cátedra de derechos humanos de la Ucla, reitera que luchan para el cumplimientos de todos los beneficios. «Urgen pensiones y salarios justos, además de la seguridad social», apunta.