María B. Jordán- LA PRENSA de Lara.- Nada como tomar un refresco bien frío con el almuerzo, pero el precio está muy caro«. Es lo que relató el señor Fernando Yépez, y así como él, varios piensan lo mismo.
El de botella más económico vale 5 mil bolívares, pero los guaros dicen que ese monto les sirve para pagar los pasajes.
Si se habla del refresco, de por al menos un litro y medio, sale en 18 mil 500 bolívares, lo que representa casi la mitad de un sueldo mínimo. «No se puede negar que una Pepsi o una Coca Cola son muy sabrosas, pero quién va a destinar esa cantidad de dinero por un refresco», soltó Yépez, detallando que de lo contrario no podría ni medio comer, porque tampoco es que le alcanza para mucho.
En un recorrido realizado por La Prensa, se constató que un refresco Big Cola de tres litros, que antes era el más económico porque alcanzaba para toda la familia, hoy cuesta 47 mil bolívares.
La gente dijo que prefieren olvidarse de los refrescos, porque además del precio, también son dañinos y por eso sacan la excusa de no comprarlos.
Hay quienes prefieren comprar los polvos para preparar jugos, colombianos, porque son más baratos y rinden más a comparación de un jugo de botella o cartón que ronda los 13 mil 600 bolívares, dependiendo la marca y la calidad, pues hay unos que pueden llegar a costar más.
«El Fructus es el que más rinde, porque un refresco o un jugo está muy caro», comentó Samuel Oropeza, detallando que un sobre en cualquier chino o bodega se consigue en 4 mil bolívares y puede rendir hasta el doble a diferencia de un jugo de botella.
Hay quienes recurren a los abastos y supermercados para darse un gustico y comprarse un refresco o un jugo, pero al mirar el precio se devuelven por el mismo camino; «es que uno ahorita no tiene para comprar porque la plata no alcanza y menos para gastarlo en un refresco«, comentó el señor Marcos Sánchez.