María B. Jordán | LA PRENSA de Lara – Nicolás Maduro dijo que ayer, nuevamente, iniciaba la cuarentena radical en toda Venezuela, pero miles de conductores ayer hicieron caso omiso a esa orden porque instalados en las colas para surtir gasolina estaban desde transportistas, médicos, comerciantes, mecánicos, amas de casas y cualquier persona que necesita equipar su carro.
Carlos Jiménez, quien estaba en la kilométrica cola que había en una de las estaciones de servicio de la avenida Libertador de Barquisimeto dijo que había llegado desde las cinco de la mañana de ayer y no pensaba moverse mostrando evidencia de que no le importó lo dicho por Maduro. De hecho el conductor confesó que estaba allí estacionado sin una hora de retorno segura porque «no sabemos si llega la gasolina y como no estoy tan lejos de la estación prefiero asegurar el puesto», explicó.
Y es que el cumplimiento de la cuarentena radical y obligatorio que dijo Maduro como prevención de la COVID-19 luego de una semana de flexibilización fue lo que menos imperó, pues la indignación, la molestia y la roncha es lo que reina en las colas sobre todo en las estaciones donde la gasolina es subsidiada.
Cientos de conductores rezagados, es decir, que su terminal de placa no correspondía al día de ayer se veían en muchas bombas de gasolina en la mañana. Múltiples irregularidades a la hora de que surtan hace que el proceso sea lento y cientos de vehículos no puedan llenar el tanque cuando les toca. Consultados aseguraron que por más cuarentena que exista y existan carros con otros terminales de placa van a seguir en la cola porque no piensan perder el tiempo que han invertido y también por la necesidad de poder movilizarse.
«La primera semana cuando tocó mi placa no pude surtir. Me tocaba el domingo y tampoco surtí, pero no me pienso mover de la cola porque necesito llenar el tanque para trabajar y movilizar a mi familia», confesó con molestia José García un conductor en Cabudare.
En la estación de La Campiña de Cabudare la cuarentena no influyó mucho en la molestia de los conductores quienes ayer en la mañana protestaron por la infinidad de problemas que allí se registran. Las personas se alzaron porque ya tenían acumulados los terminales del 1 al 6.
A pesar que estaban organizados con una lista para que nadie se metiera en la cola, dicen que el domingo sólo pasaron 90 carros de la cola luego de haber llegado la gandola, mientras que los otros 300 quedaron mirando lejos. Las personas califican que eso se trata de una falta de respeto por quienes tienen varios días pasando hambre, sueño y sed en una cola.
«Si llegó una gandola no es posible que solo haya pasado esa cantidad de carros», denunció Nélida Kasli cuando detalló que allí habían conductores del sábado, domingo y los de ayer. El grupo de personas dijo que decidieron no moverse y esperar que les dieran una solución, pues supuestamente les garantizaron que todos iban a equipar.
Las personas dijeron que ellos se alzaron y trancaron la intercomunal Acarigua–Barquisimeto, pero de inmediato llegó la Guardia Nacional. No sabemos si eso sólo quedará en palabras, porque nos prometieron que nos iban a solucionar para que todos equipemos,» dijo Eliseo Chirinos.
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