Redacción | LA PRENSA DE LARA.- Colchones con más de 15 años de uso, camas dañadas, cuartos con las ventanas destruidas y techos que se vienen abajo, es la triste radiografía de las salas de descanso de los hospitales Dr. Pastor Oropeza de Barquisimeto y del hospital del municipio Urdaneta.
Alberto Domínguez, presidente del Sindicato de Trabajadores del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), denunció que estos espacios son inhumanos para los trabajadores de la salud que deben cumplir guardias de 24 y 48 horas, además de horarios de contingencias.
En el caso del hospital de Barquisimeto, el 30% de un aproximado de 850 trabajadores deben hacer uso de estas áreas; sin embargo, ante el mal estado enfermeras, camilleros, médicos y hasta personal de limpieza deben pasar sus horas de descanso en los pasillos o en las zonas externas de los centros de salud.
«El llamado de urgencia es para que se restauren las áreas de descanso», dice Domínguez, al precisar que en cada centro de salud debe haber disponibilidad de cuartos separadas para enfermeras, médicos, obreros y técnicos radiólogos; sin embargo, en el caso del seguro de Barrio Unión, al oeste de la ciudad, el personal médico y de enfermería deben hacer uso de una misma sala.
«En Urdaneta la situación es la misma, más de 250 trabajadores no tienen un espacio digno», denuncia Domínguez, al solicitar que Inpsasel realice auditorías a hospitales y ambulatorios del estado.