Ágatha Reyes | LA PRENSA.- El régimen de Maduro ha creado un mecanismo para perpetuarse en el poder al llamar a unas elecciones apresuradas y sin garantías para su eventual oponente.
La aseveración corresponde al exalcalde de Iribarren, Alfredo Ramos, quien asegura que el adelanto de los comicios presidenciales sólo constituyen una “emboscada de Maduro para los sectores democráticos”.
Cinco meses detenido en El Helicoide no pudieron silenciar su voz de lucha en defensa de la democracia. Detalla que frente al “fraude” que, a su juicio, se generará el 22 de abril la oposición debe deponer los intereses partidistas y unificar la lucha por condiciones electorales justas donde regrese el derecho al voto libre, que precisa ha sido secuestrado.
Sin miramientos, suelta que cualquier líder de oposición que se postule tendrá que enfrentar a la historia y al pueblo venezolano. Considera que al participar se “convalida el fraude y se va al matadero”, pues no duda que el resultado electoral “ya está cantado y Maduro sólo necesita un rival opositor”.
¿Está de manos atadas la oposición?
No, sólo que no hay garantías electorales y como no las hay no se puede validar.
¿Hay partidos colaboracionistas con el gobierno?
Respeto cualquier decisión, pero quien se aparte del sentimiento nacional tendrá que enfrentar al juzgado del pueblo y la historia. Está demostrado que el sentimiento del pueblo debe ser respetado.
¿Si la salida no es electoral, entonces cuál es la vía?
La salida siempre será electoral, ahora hay que continuar en la lucha por condiciones electorales, tenemos el caso en Perú. Cuando se evidenció el fraude de Fujimori la oposición siguió con movilizaciones de calle, la comunidad internacional no las reconoció y Fujimori no le quedó otra opción que salir del poder.
¿Cree que la presión internacional ha sido débil? El gobierno sigue obviando, incluso las sanciones impuestas
Sin duda, la presión va a continuar. Maduro prácticamente está aislado y si él hace elecciones sólo se aislará más. La lucha por la libertad no tiene límites, es permanente y el llamado es continuar la lucha, por eso se plantea movimiento nacional con ONG, partidos, iglesia y universidades.
¿Cómo lograrán esa unidad si dentro de los mismos partidos no logran un consenso?
Debemos hacerlo porque el país está al borde de un colapso real. Aquí se están paralizando empresas, universidades. Está el caso de Sidetur por la hiperinflación que está agobiando a todos por igual, no hay medicinas ni alimentos.
¿Se le escapó de las manos el país al gobierno?
A Maduro se le fue el país. Esto es un sistema y se ha paralizado, las empresas del Estado están en cierre técnico y los trabajadores están siendo afectados. Los organismos públicos, como gobernaciones y alcaldías están trabajando hasta la 1:00 de la tarde.
¿Está siendo más golpeado el ciudadano de a pie con la crisis?
Sin duda alguna, la gente pasa días sin comer, a eso le sumamos la diáspora que se ha generado, ya la migración no es sólo para sectores profesionales, la gente está escapando del país, sin importar pasar siete días en carretera.
¿Con este panorama se deben reanudar los procesos de negociación?
Los políticos no pueden abandonar el instrumento del diálogo, los problemas hay que resolverlos dialogando. Ahora debe ser un diálogo con resultados y con agenda, seriedad, franco y sincero, no un diálogo sordo y de saludos a la bandera.
¿Ocurrió en Dominicana?
Claro, no se cumplieron acuerdos. Uno fue el tema de los presos políticos, dijeron que los soltarían a todos. Da dolor ver a chamos, adultos mayores gente que no ha cometido ningún delito tras las rejas. Está mi caso, ¿qué delito cometí?, fui privado de libertad cinco meses de forma arbitraria. No puedo salir del país, fui destituido del cargo, preso e inhabilitado políticamente por ejercer el derecho a manifestar como está consagrado en la CRBV.
¿Ha aumentado la persecución gubernamental?
Sí, hay más de 300 presos políticos.
¿Se replican estos patrones en el pueblo?
Claro, en sectores del pueblo hay temor porque el gobierno viola la Constitución y derechos humanos. En la Cuarta República podíamos salir a manifestar y había respeto. Hoy en día, por cualquier manifestación se llevan preso a los chamos.
Usted que ha palpado de cerca la “persecución”, ¿en qué etapa está el país en materia de DDHH?
Venezuela es uno de los países donde el gobierno tiene mayor tendencia a violar los derechos humanos. Los números hablan solos, en lo que va de año van 714 protestas y 141 saqueos y conatos de saqueo, eso muestra los niveles de insatisfacción, descontento que hay. Todo conllevan a lo mismo, falta de comida, medicina y eso es violación a los DDHH.
La exfiscal ha denunciado que fue presionada por Diosdado Cabello, ¿dejó en evidencia al gobierno?
Se está evidenciando que el gobierno usa las instituciones a su favor, además se demuestra que Leopoldo López es inocente. Quién garantiza que no ocurriera lo mismo con el resto de los presos políticos que hay en el país.
Hoy el país sigue sumergido en una crisis económica y el gobierno propone una nueva moneda, ¿cree que resultará?
Eso es otra mentira del gobierno, aquí la economía sólo cambiará cuando se cambie el modelo de gobierno que existe. No hay inversión nacional ni internacional y eso es lo que permite el crecimiento del país.
¿Qué le queda al pueblo por hacer?
Es una situación bastante difícil lo que está pasando en el país, porque incluso las universidades están dejando de funcionar y eso es muestra del deterioro que hay. No hay más opción que seguir luchando.
¿Hay esperanza en Venezuela?
No podemos perder la esperanza, debemos seguir. La unidad tiene que reconstruirse, pero debe ser con los gremios e Iglesia, debe prevalecer la unidad y es algo que debemos entender. Aquí los intereses partidistas deben quedar de un lado.