Hasta seis horas de racionamiento deben pasar los vecinos del macrosector
José D. Sequera | LA PRENSA de Lara.- «No sé porque es a esta zona a la que todos los días nos quitan la luz, no hay un solo día en que no se vaya», dijo María Pérez cuando trató de explicar porqué a un macrosector de la parroquia Unión le cortan la electricidad hasta seis horas diarias.
Vecinos de esta parroquia -que es la tercera más poblada del municipio Iribarren-, revelan que estos cortes se dan en un área que, en el sentido sur-norte comienza en la carrera 2 de Barrio Unión hasta los límites de la avenida Circunvalación Norte, mientras que en sentido este-oeste va desde la calle 10 y termina en la calle 17.
Quienes viven en esa zona aseguran pasar todo el día en zozobra a la espera de que se vaya la luz, tal como lo explica la señora Yurmi Rodríguez, una ama de casa que ha tenido problemas para atender los oficios de su hogar después de los cortes de luz, iniciados con los dos mega apagones nacionales que ocurrieron entre marzo y abril.
«Como no hay horario uno está a la expectativa. Cuando se va a las 4:00 de la mañana regresa casi al mediodía y cuando se va en la tarde-noche regresa después de las 11:00 de la noche», comentó Rodríguez sentada en una silla en el frente de casa, lugar donde casi todos los que habitan en el macrosector se ponen a esperar a que llegue el fluido eléctrico.
Para los que viven en esta parte de la parroquia Unión el día a día se ha vuelto un viacrucis, a pesar que ahora los cortes no son tan prolongados como antes, pues cuando comenzó el racionamiento ellos sufrían hasta 14 horas sin el servicio eléctrico.
Lino Sánchez es un padre de familia que cuenta lo difícil que es mantener los alimentos refrigerados por la falta de luz o incluso el pasar el día dentro de su casa sin un ventilador o aire acondicionado para refrescarse. «A veces pareciera que uno se volverá loco, porque la luz se necesita para todo», dijo.