Víctor Rodríguez | LA PRENSA DE LARA.- La pandemia de covid-19, sumado a la hiperinflación de Venezuela se han combinado para que los mercados populares de ropa, zapatos y demás prendas se vayan casi a la quiebra, ya que las ventas han bajado hasta en un 80 %, según testimonios de los comerciantes.
Desde el año pasado la situación ha estado muy crítica para los comerciantes de los mercados San Juan, Obelisco y Altagracia, ya que no entran como prioridad para trabajar todas las semanas. Muchos han tenido que buscar la manera de sobrevivir y otros han abandonado los puestos.
«Las ventas están malísimas, hay veces que me voy en blanco para la casa sin nada para por lo menos comer, está muy fuerte la cosa aquí. Algunas veces pierdo los clientes que vienen a comprar porque llegan con un billete de 10 dólares, pero cómo hago para dar vuelto si no tengo nada», manifestó Luis Reyes, quien tiene su puesto en el San Juan.
Reyes comenta que la semana pasada sólo vendió 10 dólares en toda la semana y con eso tuvo que maniobrar para poder comer en la semana. Ha tenido que hacer ofertas, pero la clientela está fuerte.
Otros comerciantes viven la misma realidad; sin embargo, informan que en los últimos días las ventas han incrementado un poco.
«Esto no es la sombra de lo que era antes. Lo que nos ha pegado mucho es la falta de gasolina, ya que para acá venía mucho la gente de campo o de pueblos lejanos a la ciudad, pero sin combustible eso se acabó», expresó Rafael Rivas en el San Juan.
Comerciantes del Altagracia reseñan que por estar en el centro de la ciudad tienen un poco más de visita; sin embargo, las ventas están bajas pues la prioridad de la gente es la comida y medicinas.
Obelisco cerrado
El día de ayer, el mercado El Obelisco estuvo cerrado y a simple vista se ve las graves condiciones en las que se encuentra.
En el pasillo principal se precisó una laguna de agua. Está muy abandonado y en la parte de afuera la basura abunda.