Guiomar López | LA PRENSA DE LARA.- A los guaros les sorprendió ese cambio repentino en el clima al pasar de vaporones con el fastidio del calor a días de lluvia frecuentes. El anuncio meteorológico indica lluvias de leves a moderadas en la región centroccidental, principalmente en Falcón, Yaracuy y Lara. Asimismo, un llamado de previsión de parte de las autoridades competentes a la población que vive en zona de amenaza de inundaciones.
Con el reflejo en el monitor y señalando el desplazamiento de la humedad expresado en tonos morados el coronel, Nixon Rodríguez, jefe encargado de la Oficina de Meteorología, explica que se trata del período tradicional de lluvias, sólo que el cambio se debe a una transición de altas temperaturas con precipitaciones moderadas, debido a la baja presión desde Colombia a causa de vientos que arrastraron la humedad al centroccidente; Yaracuy, Falcón, Portuguesa, Cojedes y Lara. Dicho desplazamiento se da atravesando la región andina, hasta llegar a las zonas costeras del país.
Recuerda que esta situación puede ser continua hasta la segunda quincena de noviembre, tomando en consideración la incidencia que tuvo desde el pacífico los fenómenos de La Niña y El Niño. Para mediados de mayo, las precipitaciones pueden estar generalizadas a nivel nacional y en el lapso de junio a octubre se podría unir otro tipo de ondas tropicales. Sería un escenario de costas con baja presión y más atractivas para las lluvias.
Reitera que no se trata de un hecho extraordinario, sino de una inestabilidad atmosférica que llega con mayor proporción desde Los Andes y proveniente del vecino país. La humedad será constante entre frecuentes lloviznas que son aquellas de gotas moderadas, mientras que las lluvias traen mayor concentración en sus gotas. De hecho, también se logran apreciar determinados sectores con precipitaciones, a diferencia de otros lugares cercanos.
Recuerda que se deben tomar las previsiones y deben ser asumidas por las autoridades competentes, así como tomar conciencia la colectividad, sobre todo aquella población que reside en áreas de quebradas. Las alertas están encendidas, de manera de evitar algún tipo de emergencia por inundaciones en aquellos poblados de alto riesgo. No hay que confiarse.