William Croes | LA PRENSA.- El mercado itinerante de los miércoles retomó sus actividades con ligeras pinceladas de orden. Desde bien temprano, más de 330 comerciantes se ubicaron en los espacios demarcados por la Alcaldía de Palavecino para iniciar su jornada que estuvo marcada por acciones de protesta de un grupo de comerciantes que denuncia haber quedado sin espacio para la venta de mercancía seca.
Ayer en la madrugada, ya estaban custodiadas por los cuerpos policiales las calles La Cruz y Guillermo Alvizu, ambas despejadas mediante decreto del alcalde el miércoles pasado por petición de los consejos comunales de Cabudare Centro que solicitaron a la máxima autoridad el despeje de ambos corredores viales para el libre tránsito de los habitantes de la zona.
El despeje calentó a unos 129 trabajadores informales que tenían sus puestos en ambas calles. Mientras comerciantes vendían en los nuevos espacios asignados, estas personas se trasladaron hasta la avenida Intercomunal Barquisimeto – Acarigua para trancar la vía y protestar por las medidas de orden que tomó el alcalde José Barreras.
“Nos colocaron en una zona que está saturada de comerciantes y no tenemos espacio”, expresa Carlos Rodríguez, representante de los comerciantes ubicados en la calle La Cruz, quien solicita al alcalde un permiso temporal para volver a su espacio inicial hasta enero.
José Barreras, alcalde de Palavecino, sostuvo que el mercado arrancó en un 70 %. La máxima autoridad municipal reiteró que no se trata de un atropello del derecho al trabajo porque quienes aceptaron las condiciones para promover un mayor orden operaron con total normalidad en un mercado que empieza a dar aires de cambio positivo.
“A los avispaos se les acabó la manguangua”, expresa Barreras en referencia al grupo que encabezó la protesta, a quienes tildó de ser los promotores de la anarquía , y que atentan contra el esfuerzo de un municipio más limpio, ordenado y seguro.