Ágatha Reyes | LA PRENSA.- La nueva postergación de las elecciones regionales y municipales para el 2018 sería un acto de doble desacato por parte del Consejo Nacional Electoral, pues estos comicios debían realizarse en diciembre del año pasado.
Tal apreciación fue expuesta por Teodoro Campos, diputado a la Asamblea Nacional, quien comentó que hay fuertes rumores de que el Gobierno nacional está organizando unas megaelecciones para el año 2018, cuando podrían elegirse alcaldes, gobernadores y Presidente de la República.
“Estamos pidiendo al CNE que se active el proceso de elecciones regionales y municipales, cumpliendo con lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, manifestó Campos.
“No sabemos lo que está planificando el gobierno, lo que corresponde para este año son las elecciones retrasadas para gobernaciones y alcaldías, y para diciembre del próximo año las presidenciales, a no ser que exista una renuncia del Presidente, por ahora sólo esperamos que se cumpla lo establecido en la ley”, afirmó Campos.
Mencionó que decir que se harán unas megaelecciones en el 2018 es crear falsas expectativas a la gente. Hizo énfasis en que lo principal y necesario es esperar y fomentar el dialogo, donde el primer tema de agenda sea la presentación de un cronograma electoral justo, que exista el reconocimiento absoluto de la AN y se recupere la libertad de expresión en el país.
Juan Tirado, representante del Partido Un Nuevo Tiempo (UNT), dijo que “el Gobierno nacional está utilizando artimañas para evadir sus responsabilidades constitucionales”, afirma que el CNE está en desacato ya que gobernadores debían tomar posesión de su cargo durante el mes de enero y no lo pudieron realizar por líneas establecidas por el PSUV, quienes a su juicio están asustados porque saben que si llaman a elecciones durante el 2017 no lograrían ganar ninguna alcaldía ni gobernación por el descontento que tiene la gente, incluso la que está dentro del chavismo por las políticas aplicadas durante los últimos años de gestión.
Afirma que en caso de no realizar las elecciones regionales durante este año, el CNE estaría en doble desacato quitándole el derecho al ciudadano de elegir quien dirija sus destinos, y como la oposición es completamente democrática tendrían como única arma el cumplimiento de la Constitución que es el sometimiento a la voluntad popular.