LA PRENSA.- “Dos chamos se montaron en la avenida Venezuela camuflados como pasajeros, pensé que tomarían su ruta normal hasta que comenzaron a amedrentarnos y a pedir todas nuestras pertenencias, en un parpadeo ya estábamos llegando a Sanidad, allí el autobús se detuvo y los chamos salieron corriendo con nuestras cosas”.
Así narró un usuario del transporte público el terror que vivió una mañana cuando iba camino a su trabajo y para su mala suerte, dos delincuentes robaron a todos los pasajeros en un santiamén. Choferes que prefieren quedar en el anonimato aseguran que se trata de una banda de choros que opera en la rutas que circulan por la Vargas.
“Uno ya los conoce y no se detiene, pero a veces se esconden entre la multitud en las paradas y cuando se suben pasajeros, ellos aprovechan también de subir. En un descuido ya nos están atracando a todos. En ocasiones andan armados y no tienen piedad ni siquiera con los abuelos”, soltó un conductor.