Ana Uzcátegui | LA PRENSA de Lara – Una línea política más contundente contra el gobierno de Maduro para tratar de obtener el respaldo abrumador de la población y presionar por un cambio definitivo del gobierno, es lo que necesita Juan Guaidó luego del respaldo recibido en su gira por varios países del mundo, así lo considera Luis Fidhel, internacionalista, al referirse que cuando se dé su ingreso al país, el líder opositor requiere un «discurso más radical», y reajustar su estrategia.
Afirma que durante todo el 2020 el país seguirá estando en el ojo de la comunidad internacional por la amenaza que representa que el oficialismo mantenga vínculos con líderes de Oriente Medio señalados de terroristas, y por la campaña política de Donald Trump, quien busca la reelección a la presidencia de EE.UU, teniendo entre sus promesas la «destrucción de la tiranía» en Venezuela.
¿Qué impacto tiene la gira de Juan Guaidó y el hecho que lo hayan recibido tantos jefes de gobierno?
Tiene un impacto dentro de la campaña electoral norteamericana. Donald Trump es muy seguro que se lanza a la reelección y el tema Venezuela va a estar en la palestra porque busca ganar el voto latino de Florida.
Habla de EE.UU, pero ¿qué papel juega la Unión Europea y Colombia en esta gira?
Este es un problema norteamericano, la Unión Europea es un espectador, dan o quitan apoyo, pero realmente la solución va por EE.UU y Colombia que es su gran aliado, frente a un gobierno que han considerado de amenaza para su seguridad, por las relaciones que mantiene el chavismo con Siria, Irán e Irak, países terroristas.
¿Qué representa que Guaidó haya sido ovacionado en el Congreso de EE.UU tanto por republicanos como por demócratas?
Representa que a pesar de la confrontación política entre republicanos y demócratas la revolución bolivariana siempre ha sido considerada una amenaza de Estado. Por eso fue un gobierno demócrata el de Barack Obama, el que inició con las sanciones de carácter individual contra funcionarios de Maduro en 2014.
Su encuentro con Donald Trump en la Casa Blanca ¿Qué consecuencias tiene para la política nacional?
Chávez falleció sin lograr la foto oficial con un presidente de EE.UU en la Casa Blanca, pero dos políticos de oposición han logrado ese acercamiento, María Corina Machado en 2005 con George Bush y ahora Guaidó. Ambos líderes coinciden en rechazar las elecciones legislativas mientras no se realicen comicios presidenciales. La tesis de EE.UU es la salida de Maduro presionando por un quiebre que le reste apoyo militar.
Mike Pompeo, Elliott Abrams y Nancy Pelosi se reunieron con Guaidó ¿qué se puede interpretar de todo este apoyo?
Desde el punto de vista interno, la presidencia interina de Venezuela estaba perdiendo apoyo popular a partir del fallido golpe de Estado del 31 de marzo de 2019, pero Maduro cometió un error político el 5 de enero al tomar por la fuerza el Parlamento, ese episodio relanzó a Guaidó y a la oposición internacionalmente y fue contraproducente para el chavismo.
¿Cómo puede influir esto en Venezuela?
Estamos bajo un régimen de sanciones económicas, Maduro tiene acortados los recursos y eso se refleja en la disminución de sus inversiones en infraestructura pública, y en las fallas en los servicios públicos que pueden seguir en decadencia, impulsando el descontento nacional.
A pesar de todo el apoyo que ha tenido Guaidó, poco ha avanzado en el terreno político. ¿Esta gira ha logrado debilitar a Maduro?
Esta gira pone en alerta a Maduro que se ha podido mantener por falta de una claridad estratégica de la oposición. El gobierno ha visto mermado sus recursos. Se habla que pudiera haber una negociación con EE.UU y un sector del chavismo para un cambio político, pero la estrategia de EE.UU en este momento es promover la salida de Maduro con mayor presión.
¿Cómo afecta a Maduro externamente esta gira?
Es muy probable que el canciller Arreaza viaje a los países aliados en busca de apoyo, pero ni Rusia, ni China, ni Irak van a realizar una guerra por Venezuela contra EE.UU. Estos países tienen intereses económicos que lo pueden negociar en cualquier momento con EE.UU. Las relaciones Rusia-EEUU, son de amor y odio y Venezuela no resulta importante.
¿Cuáles son los retos que debería enfrentar la oposición?
Este apoyo es un respiro a una política de la oposición que ya venía en decadencia. Es muy posible que Maduro se vea en la necesidad de negociar, de hecho, expresar que la dolarización es buena, quiere decir que la economía norteamericana sigue siendo preponderante en la venezolana. La oposición debe trabajar en activar la movilización de calle y llegar al sector militar que sostiene a Maduro.
¿Cómo evalúa el discurso de Guaidó en esta gira internacional?
Guaidó tiene que tener un discurso más radical, porque el discurso electoral norteamericano se va a radicalizar con respecto a Venezuela y el Medio Oriente.
¿Qué más puede hacer Trump y la comunidad internacional para lograr el cambio de gobierno?
La mayor presión va a ser en el sector económico porque es la parte más sensible del gobierno bolivariano. Hay que tener en cuenta que Maduro no es Chávez, el presidente Chávez tenía un peso político específico, un liderazgo sin divisiones, actualmente sí hay divisiones dentro del chavismo.
¿Cómo enfrentar el factor tiempo en un año donde el chavismo insiste en elecciones parlamentarias?
Las elecciones parlamentarias tras el apoyo de EE.UU. serían nulas, no serían legítimas.
¿Ya no estaría entrampada la oposición en esta decisión por eso de no perder espacios ganados?
No, con esta gira ciertos factores que buscaban participar en unas elecciones parlamentarias van a tener que cambiar su discurso.
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