Ana León |LA PRENSA.-Dos semanas después de las elecciones regionales parte de los habitantes de la comunidad Santo Domingo ven cercenados los beneficios de la bolsa de comida CLAP por no haberse acercado hasta el punto rojo colocado en los centros de votación, no haber participado en los comicios o simplemente por haber votado por otro candidato.
Alrededor de 1015 bolsas de comida y de un combo higiénico que se pidieron para la comunidad sólo se repartieron 815. Las 200 restantes “no sabemos dónde fueron a parar o qué hicieron con ellas”.
Todo esto se viene suscitando desde hace dos meses cuando se abrió un CLAP paralelo en la comunidad presidido por Lisbeth Almao, quien aparentemente es comerciante del sector.
Se supo que fue a través de Magda Gutiérrez, coordinadora principal de las UBCh, y José Luis Ortega, coordinador del CLAP en la parroquia Concepción que se logró crear el CLAP paralelo, lo que dio pie a las “irregularidades que se están cometiendo contra la comunidad”.
Según comentaron los habitantes, Transbarca tampoco ha brindado ayuda, porque aparentemente iban a hacer un censo ayer donde preguntarían quien tenía el carnet de la patria y sólo las personas que lo hayan sacado son las que van a recibir el beneficio del CLAP.
Amenazados
El día de las elecciones, parte de los 200 habitantes recibieron mensajes de textos de los voceros principales del CLAP del consejo comunal de Santo Domingo, donde se les avisaba que no se les iba a dar más el beneficio de la bolsa por “sabotear las elecciones” y por protestar.
Ante esto, 75 de los vecinos se unieron y llevaron una denuncia a la Fiscalía 22, donde presentaron un documento que contenía las firmas de cada uno y las fotos de los mensajes de texto enviados a las personas.