Ana León | LA PRENSA.- Desde el 2008, el terreno donde se ubica la comunidad La Bendición de Dios en Agua Viva, municipio Palavecino ha tenido problemas. No les han aprobado la titularidad del terreno, y los han dejado por más de cuatro años esperando una vivienda.
Los habitantes no salen de las decepciones. Materiales de construcción como cabillas, piedras, arena y mallas se han ido perdiendo porque el ingeniero responsable de la obra los ignora.
De las 40 familias, sólo tres tienen las casas listas, unas 18 tienen algunos muros levantados, pero les falta el techo, cerámicas, pocetas y demás accesorios. El resto apenas tiene unas cabillas colocadas o simplemente no tienen nada.
Todo el problema se origina porque el terreno que tienen habitado desde el 2008 pertenecía a María Isabel de Chávez. La alcaldía, en ese entonces, no quiso ayudarlos en la recuperación del terreno y su titularidad debido al confrontamiento político y con el pasar de los años les han puesto muchas trabas para poder recuperar el terreno desde cero.
Para poder fundar la comunidad, los habitantes debieron contratar a un topógrafo y hacer una solicitud por la Misión Vivienda. Además de enfrentar amenazas y de tener que quedarse resguardando el lugar porque todos los días llegaba una persona amenazando con que les quitaría el lugar donde ellos querían fundar las bases de sus hogares.
A finales del mes de septiembre unas personas intentaron tomar el terreno, pero no resultó porque los habitantes salieron a defender su comunidad.
Todo lo que piden los habitantes es que los entes competentes les ayuden a poder terminar sus viviendas. Pues a diferencia de otros sectores, sus casas no están terminadas porque no existen en la alcaldía.