Lorena Rojas | LA PRENSA DE LARA.- Para demostrar las calamidades que viven a diario los pacientes y el personal de salud en los centros asistenciales públicos del estado Lara, el sindicato de trabajadores del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), Sindicato Único Nacional de Empleados Públicos (SunepSas), y el Sindicato de Empleados Públicos del Ejecutivo del estado Lara (Sepeel), realizaron un estudio e informe en el que detallaron las deficiencias que se presentan en 16 hospitales y ambulatorios en los 9 municipios de la entidad.
El informe detalló que un 90% de las ambulancias se encuentran inoperativas, un 75% de los laboratorios están cerrados o sólo ofreciendo exámenes de heces y orina, el 70% de los servicios de Rayos X han dejado de funcionar, que hay un déficit del 65% del personal y suman que no hay tomógrafo a nivel público.
Alberto Domínguez, presidente del sindicato del IVSS, presentó dicho informe en rechazo del 1 x 10 que se habría instaurado hace algunos días por el Gobierno nacional para conocer las deficiencias y asimismo lo catalogó como una pérdida de tiempo, pues varios gremios han precisado cuáles serían las carencias en materia de salud.
En el caso de las ambulancias, el sindicalista precisa que cuatro de los municipios del estado cuentan con este servicio, como son Iribarren, Jiménez, Palavecino y Simón Planas, donde sumarían 10 unidades, las cuales asegura que son insuficientes debido a que, según la OMS, por cada 25 mil habitantes debe existir una ambulancia; es decir, que en Lara como hay 2 millones de habitantes, deberían estar disponibles un total de 80 ambulancias. Los cinco municipios restantes hacen traslados de pacientes de manera particular.
En el caso de los Rayos X, detalló que estarían funcionando a medias estos servicios en el Hospital Central y del Hospital Luis Gómez López, y con exámenes de laboratorio se estaría trabajando sólo con el 25% de los centros públicos a falta de reactivos.
Otro carencia reflejada es la escasez del suero antiofídico que está en un 90 por ciento y de servicios como odontología y sillas de ruedas, donde faltan entre 60 y 70 por ciento.