Iván Márquez y Benigno González son los artistas que estuvieron a cargo de realizar los monumentos que son considerados como un aporte cultural y estético porque se trata del realce histórico de personajes que marcaron un hito en la ciudad, y su elaboración transciende en la oportunidad que tuvieron ambos artistas en dar un aporte al desarrollo de la ciudad.
“Tenía la maqueta del indio Jirahara guardada. La primera vez que se la presenté a Henri Falcón era alcalde”, detalla Benigno González, quien en abril, durante una actividad, el gobernador le pidió que desempolvara el proyecto del monumento porque había una posibilidad de materializarlo.
González comenta que a la figura del imponente indio Jirahara de nueve metros de longitud y 36 toneladas de peso le tuvo que hacer un par de modificaciones. La más relevante fue que eliminó la postura original que era como si entregara un cetro y lo diseño erguido para resaltar su imponencia, propia de su etnia.
Por su parte, Iván “El Pecas” Márquez fue el encargado de elaborar el monumento de Isidra “La Veragacha”. El imponente monumento fue colocado en el distribuidor que tiene el mismo nombre y está cercano a la entrada de la ciudad.
“Fue un honor poder plasmar a Isidra que es conocida como la loca de Veragacha, y es parte de los barquisimetanos y recordada por las carreras que le hacía pegar a los niños que mencionaban su apodo”, expresa Márquez.
Ambos artistas se valieron de los mismos materiales para la elaboración de las piezas. Partieron de una estructura metálica hecha con tubos ligeros y alambres gruesos que fueron moldeados con mortero de concreto y polvo de mármol para dar una consistencia más firme y resistente.
El impacto cultural y ornamental de los monumentos se replicará en los diferentes municipios de la entidad. El Caimán de Sanare y el maestro Alirio Díaz también serán inmortalizados.