Evana Materán | LA PRENSA.- A las 7:30 pm llega Ronald Piñero al Diario La Prensa, se coloca su braga azul y botas de seguridad para comenzar a trabajar junto a sus compañeros de rotativa. Se dedican al mantenimiento y supervisión de las máquinas donde se imprime cada madrugada el periódico, las revistas y suplementos de La Prensa.
El trabajo del equipo de rotativa es de “mucha concentración y rapidez”. Aunque el periódico se empieza a imprimir luego de la medianoche, que es cuando “bajan las planchas”, los operadores de las máquinas se preparan para que el proceso se realice con eficacia.
Observan con cuidado cada detalle. Registran los colores para que no se “riegue” la tinta y evitar que se manche el papel. Si se presenta algún problema con las correas tratan de arreglarlo en poco tiempo para que el periódico llegue a las calles antes del amanecer.
Se esfuerzan para que los lectores tengan un periódico de calidad en sus manos.
Riesgos
Aunque pueden presentarse accidentes, los trabajadores se sienten cómodos en el proceso de impresión.


