Ana Uzcátegui | LA PRENSA DE LARA.- Siete colegios de Fe y Alegría de Lara iniciaron campañ;a para que los niñ;os y adolescentes que pasaron a primer grado, sexto o que culminaron su bachillerato no rayen sus franelas y aquellas que estén en buen estado sean donadas a los más pobres. Esta es una estrategia implementada por esta red de colegios católicos de Venezuela para disminuir la deserción escolar.
«Es una campañ;a de conciencia y desprendimiento, porque cuando somos estudiantes sentimos mucho esa pertenencia de mi escuela, guardo la franela porque la rayo para tener ese recuerdo. Pero hemos hecho más bien la campañ;a de que otro la utilice, de que ese otro niñ;o que no tiene la posibilidad económica de adquirir el uniforme podamos ser ese granito de arena para ayudarlo a seguir estudiando», explicó Johanny Ereú, coordinadora de la cátedra de Ciudadanía, del Colegio Fe y Alegría Juan XXIII, ubicado en el barrio La Pastora, al oeste de Barquisimeto.
En el Colegio Monseñ;or Romero, en El Trompillo parte alta, hay aproximadamente una matrícula de 650 alumnos que cursan desde preescolar hasta sexto grado, pero el 80% se encuentra en niveles de pobreza, conforman la tasa de morosidad que registra esta unidad educativa.
Flor Alba Ramírez, directora de la institución, mostraba dos bolsas llenas de uniformes que ya han logrado recolectar. «En septiembre se ubicarán a los niñ;os de escasos recursos para entregarlos», señ;ala. En el comercio una chemise ronda los 15 dólares, un pantalón los 20 dólares y un par de zapatos superan los 25 dólares.
Puede ampliar esta información en nuestra edición impresa de este lunes 31 de julio.