Cristina Linárez | LA PRENSA.- Estudiantes de todos los decanatos de la UCLA decidieron ayer en una asamblea seguir nuevamente con la paralización de clases, luego de tres semanas, pues aseguran que aún no hay condiciones para reanudar las actividades. Luego se concentraron en la avenida Venezuela con Morán para manifestar su descontento ante la situación del país.
La asamblea se desarrolló en el rectorado de la UCLA, en donde se debatió la crisis que atraviesa y los motivos de la paralización como lo son las protestas, los detenidos y muertos en las manifestaciones que siguen aumentando. Además de que tras 52 días de lucha el Gobierno Nacional aún no doblega sus acciones en el país.
Jesús Suárez, representante del centro de estudiante de la UCLA, manifestó que la suspensión de clases es en solidaridad por todo lo que está pasando en el país, y en apoyo a los que también están poniendo su cara en alto en las protestas luchando por una mejor Venezuela.
Además destacó que las condiciones en la universidad tampoco están aptas, ya que desde que empezaron las protestas el Ministerio no les envía el proteico, y ya no tienen el apoyo para el transporte con los autobuses de Transbarca.
Potazo por un herido
Los universitarios luego de la asamblea, se concentraron en la Avenida Venezuela con Morán y además de pedir libertad para el país y los detenidos, hicieron una operación pote para recolectar fondos por un compañero estudiante de Veterinaria que al recibir un disparo de perdigón en el ojo, lo perdió.