Ágatha Reyes | LA PRENSA.- El 15-O se materializó el escenario menos deseado para la oposición. La unidad sólo alcanzó 5 gobernaciones, mientras que el oficialismo logró 17 sillas regionales. Politólogos regionales consideran que la victoria del partido de gobierno responde a errores que la MUD no previó durante el proceso electoral.
Mirasol Bustamante, politólogo y miembro del partido Proyecto Venezuela, considera que confiarse en que el 82 % de rechazo hacia el Ejecutivo nacional sería representativo a favor de la unidad fue un error, a su juicio no se tomó en cuenta la inconformidad que existe hacia la dirigencia opositora por la inconsistencia en discurso y acciones de lucha de líderes políticos.
Señala el caso del estado Lara, donde el “voto castigo” derrotó a Henri Falcón, atribuyendo a que su campaña respondió a justificar las fallas en la gestión.
Otro error fueron las primarias, el politólogo Horacio Zavala explica que la diatriba generada por acusaciones de “robo de votos” entre la misma militancia ocasionó que “se invalidaron ellos mismos y dieron argumentos al chavismo para mantener un proyecto de país”.
Gerardo González, politólogo y miembro del PSUV, dice que durante las internas de la oposición se notó la “ambición de poder de cada partido”, lo que considera fue el fin de la MUD.