A 479 años de su fundación, El Tocuyo, como el primer asentamiento español en tierra firme venezolana, ha sido testigo de grandes transformaciones para la historia y la identidad nacional moderna.
Para el politólogo, Radamés Larrazabal, exalcalde del municipio, la ciudad en el siglo XVI nace como un pequeño asentamiento español convirtiéndose rápidamente en un centro administrativo y religioso. Su estratégica ubicación fue un punto clave para la colonización de Venezuela. En los siglos XVII y XVIII experimenta un gran crecimiento económico, gracias a la producción agrícola y ganadera, consolidándose como un importante centro comercial. Su arquitectura colonial, aún visible en el casco histórico, es un testimonio de esa época. Con la independencia de Venezuela, El Tocuyo pierde su estatus de capital, pero sigue siendo un centro influyente en la región.
Aunque sufrió los embates de las guerras civiles y la crisis económica en el siglo XX, la ciudad se moderniza incorporando nuevos servicios y desarrollos urbanos; sin embargo, también enfrenta desafíos como la migración de sus habitantes hacia las grandes ciudades y la pérdida de alguna de sus tradiciones. El Tocuyo busca preservar su patrimonio, se adapta a los retos de la globalización en cuanto al turismo, cultura y la promoción de sus tradiciones, pilares fundamentales para su desarrollo. Como semillero cultural ha marcado la historia del estado Lara y de Venezuela, destaca Larrazabal.
Si bien es cierto que a El Tocuyo se le ha reconocido como la «Ciudad Madre», la que nació hace 479 años, para el cronista, Rolando Graterol, es importante recordar que luego del terremoto del 3 de agosto de 1950 se afectaron algunas estructuras, espacios que la dictadura en su afán modernizador de la época destruyó. La vieja arquitectura colonial basada en barro y madera y teja fue sustituida por el concreto armado, por el asfalto, el cemento y el hierro.
Un acto colonial en El Tocuyo
Sobre la fecha del 7 de diciembre de 1545, el cronista hace hincapié en que se debe recordar que fue un acto colonial y que vivimos por tres siglos como colonias de España y eso ya terminó con la guerra de independencia que se dio hace 200 años, pero aún lo recuerdan y eso se respeta. Recalca que la fundación es un acto político administrativo que se da y en El Tocuyo, hasta la fecha, no existen pruebas.
De lo que se habla es de varias versiones de la fundación, la primera relata que esa fecha la dio un historiador español colonial llamado Oviedos Ibaño, quien señalaba que Juan de Carvajal hizo el reparto de la encomienda el 7 de diciembre de 1545. Otra fuente dice que Carvajal entró al Valle de El Tocuyo y sometió a una aldea a partir del 2 de noviembre de 1545, esto no significa que la fecha esté errada, simplemente que hubo una entrada a una población que existía en el lugar.
Graterol considera que este proceso no se debe negar, pero se debe reflexionar lo que significó ser una colonia de España, una economía de plantación y el tráfico con seres humanos. «Aún hay libros de bautismo de 1790 hasta 1821, donde aparecen reseñados todos los bautismos de los esclavizados que eran nacidos en El Tocuyo y eran llevados a la iglesia Concepción, porque eran propiedad de los blancos. Ya han pasado más de 200 años en los que hay un pueblo independiente y libre.