William Croes | LA PRENSA.- Licorerías registran una disminución en la venta de cerveza de un 50% cada semana. El incremento de la caja ha modificado el patrón de consumo de los larenses que ahora se inclinan por los licores secos y comprar, si acaso, una caja para no perder la costumbre.
El aumento del precio de la caja de Regional y Polar en más de un 100% tumbó el poder adquisitivo de los consumidores, quienes venían de pagar 3 mil 500 por una caja de 36 botellas y de la noche a la mañana ahora deben desenfundar de sus billeteras 8 mil 500 bolos.
A principios de año, la Cámara de Licoreros del estado Lara hizo un estudio que registraba que el patrón de consumo se inclinaba en el consumo de cerveza en un 85%. “El otro 15% iba destinado a la compra de otros licores, el hielo y refresco”, expresa Douglas Sánchez, presidente de la cámara.
Seis meses después la balanza aún se inclina en la cerveza, pero un 55%, mientras que el otro 45% va destinado a la compra de licores como cocuy y ron que por su precio ha ganado terreno. “El cliente ahora compra una caja de cerveza o cuatro o seis botellas o latas”, indica Sánchez, quien argumenta que la tendencia es que a fin de año los licores secos superen a la birra.
Las cajas están quedando frías en las neveras de las licorerías. La venta de cerveza ha caído en un 50%. Los comercios ahora tienen inventario del producto porque se mueve menos que hace unos cuantos meses atrás.
Eduardo Algarra, dueño de una licorería en San José, expresa que poco a poco el despacho de Polar se ha normalizado. “Pasamos de no tener ni una caja a tenerlas frías en la nevera porque muy poca gente se la está llevando con el precio nuevo”.
Por su parte, Félix Torrealba, un consumidor indica que ahora compra una sola caja cada 15 días. “Es parte de los ajustes que he tenido que hacer, antes compraba una todos los fines de semana para compartir en las reuniones familiares o disfrutar con los vecinos”, cuenta el señor que ahora alterna las birras con el cocuy o el ron que son otra opción.