Redacción | LA PRENSA DE LARA.- Monseñor Carlos Curiel, obispo de la Diócesis de Carora, recomendó a la feligresía y representantes de las instituciones educativas poner en práctica los tres verbos del Pacto Educativo Global: escucha, diálogo y acompañamiento.
Las declaraciones las hizo durante el cuarto foro denominado «La escuela en diálogo con la iglesia», realizado el pasado sábado 30 de abril en el salón de usos múltiples de la Catedral San Juan Bautista de Carora, en Torres.
Durante la jornada, los ponentes explicaron la estrecha relación que debe existir entre la educación y la iglesia, reflexionando sobre las causas que han perjudicado los vínculos entre ambas. Sugirieron, además escuchar más a los niños y jóvenes, así como visualizar sus realidades a través de un acompañamiento que dé respuesta a sus momentos vitales, formación integral, inclusiva y visionaria.
Los ponentes precisaron que la idea es ofrecer espacios formativos que capaciten a los niños y jóvenes para la vida, el mundo del trabajo ofreciendo sus dones y talentos al servicio de la humanidad.
Monseñor Curiel indicó que «es importante vivir desde la auténtica esperanza que brota de personas que están dispuestas a aportar lo mejor de sí«.
En la actividad participaron Luis Juárez, coordinador de la Pastoral Juvenil de la Diócesis de Carora; Ana Mosquera, docente catequista; Esperanza de Riera, profesora de larga trayectoria educativa en Carora y el presbítero Ernesto Camacho, vicario pastoral de la Diócesis de Carora, además del rector del Santuario Diocesano de Nuestra Señora de Chiquinquirá de Aregue.
El presbítero, Douglas Alvarado, invitó a no tener miedo asumiendo con fortaleza los nuevos desafíos.